El gran Lutoslawski
Antoni Wit, nacido en Cracovia, 1944, es un maestro preparado, ecléctico, minucioso y expresivo. Formado junto a Henry Czyz, se incorporó al espíritu de la vanguardia polaca y así gusta de interpretar la música de nuestro tiempo junto al gran repertorio del pasado. Pocas obras tan hermosas y significativas de la contemporaneidad como el Concierto para violónchelo de Witold Lutoslawski (1913-1994), uno de, los grandes del siglo XX no sólo por cuanto aporta de nuevo, sino también por lo que tiene de estabilización. El concierto, estrenado por Rostropóvich en Londres el año 1970 y escuchado en Madrid a Lluis Claret en 1977 con la ONE, supone una de las cimas de la modernidad dentro de la combinación concertada de orquesta y chelo; el trabajo es tan magistral, preciosista, milimétricamente calculado y, al mismo tiempo, con tan fuerte impulso expresivo, que el impacto sobre el público es seguro. Casi podríamos decir que se trata de una partitura para dos solistas desiguales: el violonchelista y el conjunto sinfónico.Ha venido a Madrid para protagonizar la gran obra de Lutoslawski Ivan Monigheti (Riga, 1948), el último discípulo que tuvo Rostropóvich en la URSS. Es un intérprete absolutamente sensacional por la facilidad de una técnica portentosa, la belleza del sonido y el rigor de los conceptos. La respuesta por parte de la orquesta en manos de Wit fue excelente y el público ovacionó la página del gran polaco como si se tratara de Chaikovski. Ante tal reacción, Monigheti tocó fuera de programa la Serenata de Penderecki.
Orquesta de Radiotelevisión
Director: A. Wit. Solista:I. Monigheti, violonchelista. Obras de Darias, Lutoslawski y Chaikovski. Teatro Monumental, Madrid, 13 de febrero.
Buceador de palabras
El programa comenzó con una clara y pujante traducción de Vidres, de Javier Darias (Alcoy, 1946). Viene a ser un resumen, a lo grande, de una serie de procesos previos ensayados en la electroacústica o en el órgano y nos muestra datos fundamentales de este compositor, constante buceador de palabrás nuevas o inéditas combinaciones de las siempre usadas. Obra y compositor fueron muy aplaudidos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.