Bronca entre Aduanas y la Guardia Civil por una operación antidroga

Las peleas y la falta de coordinación entre la Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) en la lucha contra el narcotráfico y el contrabando llegaron en la noche del pasado miércoles a rozar el ridículo. Funcionarios de ambos cuerpos mantuvieron una formidable bronca por hacerse cargo de los detenidos y el hachís de una patera que había sido interceptada en la plaza de Los Lances, en Tarifa (Cádiz).

, La discusión de los agentes llegó a tal punto de tensión que incluso un guardia civil amenazó con disparar contra una embarcación de los aduaneros que participaba en la operación. Los hechos han sido puestos en conocimiento de la autoridad judicial. Al final, "el botín" de apresados y droga incautada se repartió entre ambos cuerpos.Poco antes de las ocho de la tarde del miércoles, funcionarios del SVA, organismo dependiente de la Agencia Tributaria, iniciaban una de tantas actuaciones contra el tráfico de drogas que se registra en el litoral gaditano. Los agentes seguían la trayecto ria de una patera procedente del norte de Marruecos que se dirigía al litoral. En el dispositivo participaban la patrullera HJ-VIII y el helicóptero de los aduaneros Argos. En tierra aguardaban cuatro vehículos del servicio. La patera fue finalmente interceptada cuando había llegado a la playa y sus siete tripulantes, todos ellos magrebíes, estaban desembarcando los 13 bultos de droga que portaban. Al notar la presencia de los agentes del SVA, uno de los magrebíes emprendió la huida a la carrera. No llegó muy lejos. Miembros de una patrulla de los Grupos Rurales de Seguridad de la Guardia Civil, desplegados en la zona para vigilar las obras del tendido de alta tensión de Tarifa, le detuvieron.

Es entonces cuando se suceden escenas que rayan el ridículo. José Luis Pérez Quintero, delegado del sindicato CSI-CSIF, en la Agencia Tributaria, asegura que cuando los agentes del SVA habían detenido "a todos los tripulantes, excepto a dos y habían intervenido los los bultos, aparecen los guardias civiles, quienes afirman que se hacen cargo tanto de la droga como de los arrestados".

"A partir de ahí, se inició una fuerte discusión, muy caliente en algunos momentos. Se llegó al insulto personal y al enfrentamiento, hasta el punto de que un guardia civil amenazó con disparar a la embarcación auxiliar del patrullero. Al final, debido a la postura de fuerza de la Guardia Civil, se hicieron con dos detenidos y tres de los bultos incautados", añadió Pérez Quintero. La Guardia Civil se hizo cargo del detenido que habían capturado sus agentes y de uno de los seis arrestados por el SVA. Siete de los 13 bultos de hachís quedaron en manos del servicio fiscal, mientras que de otros tres, con un peso total cercano a los 100 kilogramos, se hizo cargo el instituto armado.

Los funcionarios del SVA lamentan la actitud que, según ellos, tomó el capitán de la Guardia Civil destinado en el puerto de Tarifa, J. M. Rodríguez, "quien en vez de apaciguar los ánimos, increpó a los agentes del SVA gritándoles que ya estaba bien", según la versión de Quintero, quien añadió que esta actitud no les sorprende "porque en diciembre este hombre protagonizó otro incidente similar".

El sindicato de funcionarios equipara interpreta estos hechos como una clara actitud del Instituto Armado para desplazar al Servicio de Vigilancia Aduanera de la lucha contra el tráfico de drogas y el contrabando. "Parece que hay, más bien, una intención de justificar un trabajo y una estadística por parte de la Guardia Civil antes que hacer un frente común contra la droga", indicó Pérez Quintero. El sindicato tiene previsto mostrar hoy diversas pruebas que "demuestran a las claras lo sucedido". Entre ellas figura un vídeo rodado por el helicóptero del SVA que recoge imágenes del enfrentamiento.

El sindicato culpa de lo sucedido al Gobierno Civil de Cádiz, cuyo titular es Jesús Hermida, "por no trabajar en la coordinación de las fuerzas". El Gobierno Civil no ha ofrecido una versión oficial de los hechos.

Para el delegado del Gobierno, lo importante es que se ha decomisado una importante cantidad de droga en la operación, por lo que "si luego hay pequeños rifirrafes entre ellos, no hay que exagerarlos". Torres Hurta do recordó a los gobernadores civiles que tienen la obligación de coordinar la actuación de los efectivos del SVA, la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía para evitar nuevas descoordinaciones.