Reabierto el caso por el registro del coche de un dirigente 'abertzale'

, La Audiencia de San Sebastián ordenó ayer al juez de instrucción Justo Rodríguez reabrir por segunda vez la investigación sobre la entrada de un militar, supuesto miembro del Cesid, en el coche del dirigente de HB Jose María Olarra. Los argumentos de la Sección Segunda de la Audiencia donostiarra, presidida por el magistrado Luis Blánquez, son muy similares a los que la misma Sala sostuvo en junio pasado para instar la primera reapertura del caso: "no se han agotado las investigaciones

Los hechos que dieron lugar a la denuncia de Olarra ocurrieron en San Sebastián el 22 de junio de 1995, cuando vio a varios hombres cerca de su coche. Persiguió a uno de ellos y le obligó a entrar en una cercana comisaría de la Ertzaintza, donde le denunció por entrar ilegalmente en su coche. Tras varias diligencias para esclarecer los hechos y averiguar si el militar era agente del Cesid, el juez instructor archivó la causa por no ser delito la entrada en vehículo ajeno y por la "deficiente incoación del atestado" de la Ertzaintza.

En el nuevo auto, Blánquez dice que "sonrojo debía causar [al instructor] el reconocer incapacidad para obtener datos teniendo a todos los cuerpos policiales a la espera de instrucciones, cuando, mientras tanto y en Prensa, estos mismos [datos] aparecían con lujo de detalles", en referencia a un reportaje de Egin.