El juez Moreiras dice que las cintas con conversaciones del empresario Manuel Prado las encontró en su buzón
Las transcripciones de conversaciones tele fónicas mantenidas por Manuel Prado y Colón de Carvajal fueron entregadas a la Fiscalía Anticorrupción por el ex juez de la Audiencia Nacional Miguel Moreiras. Moreiras las entregó en diciembre, cuando ya había sido suspendido temporalmente por falta muy grave. El juez, que en cuatro ocasiones se negó a aceptar a trámite una querella de Torras contra Javier de la Rosa, afirmó habérselas encontrado en el buzón de su casa. Fuentes judiciales expresaron su "extrañeza ante el hecho de que un juez no acudiera ante el juez de guardia a denunciar los hechos". Una vez más, la conducta de este juez provoca extrañeza en los propios medios judiciales.
Muchos son los elementos que apoyan la idea de que se busca la publicidad, en una historia que arranca hace un año, cuando un supuesto Frente Nacional para la Liberación de Kuwait comenzó a hacer llamadas a abogados, periodistas y empresarios, entre ellos a Manuel Prado. Por aquellas fechas, De la Rosa, que mantiene un enfrentamiento abierto con Prado, habló sobre la existencia de estas grabaciones con los supuestos árabes a algunos medios de comunicación.Posteriormente, y una vez que Moreiras hubo entregado las transcripciones, De la Rosa, que estaba al corriente de esos hechos a pesar del carácter secreto de las diligencias, pidió acudir a declarar.
Cuando resultó evidente que la fiscalía no le iba a llamar a declarar, De la Rosa dio un paso más y presentó una querella por calumnias contra Prado. En esa acción judicial el propio De la Rosa reconoció haber "adquirido" las grabaciones y haberlas transcrito. La mención a la existencia de las grabaciones le permite utilizar las supuestas palabras de Prado como argumento para la querella por calumnias.
Algunas fuentes han interpretado la presentación de la querella de De la Rosa contra Prado como un intento más de dar publicidad a la existencia de las cintas. De hecho, el mismo De la Rosa advierte en el documento presentado en el juzgado sobre la posibilidad de que se produzcan filtraciones del contenido de las conversaciones. Esta advertencia sobre lo que pueda ocurrir en el futuro ha sido acogida con preocupación en medios judiciales.
La querella ha sido elaborada por el abogado Ferran Grasas, del despacho de Francesc Jufresa, defensor de De la Rosa en el caso Grand Tibidabo. No es la primera vez que De la Rosa aparece mezclado en asuntos de escuchas telefónicas.
El último caso conocido se refiere a Carles Vilarrubí, quien dimitió como consejero delegado de Tibigardens, tras negarse a desviar hacia empresas de De la Rosa un aval aprobado por el Parlament de Cataluña. Poco después circularon cintas con conversaciones de Vilarrubí y la policía descubrió que sus teléfonos estaban pinchados.
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