Una sede del PNV y otra de EA, destrozadas en disturbios de apoyo a ETA
Tres presuntos miembros de los grupos Y de apoyo a ETA ingresaron ayer en prisión por orden del juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño. Dos fueron encarcelados en la madrugada y un tercero en la tarde de ayer. Su respuesta, en forma de nuevos destrozos, llegó de inmediato. En la madrugada del domingo, los violentos causaron desperfectos en la sede del PNV en Gernika y en la de Eusko Alkartasuna (EA) en Hernani, en la estación de Renfe en Andoáin y en una oficina bancaria de Vitoria. Ayer tarde quemaron un autobús en Bilbao y, en un homenaje a la ikurriña, prendieron fuego a las banderas de España y Francia en San Sebastián.
La quema de banderas se produjo en la Plaza de la Constitución, la céntrica plaza donostiarra de la asediada librería Lagun. El incendio del autobús ocurrió en la zona de Mazustegi, a la altura de la carretera de Castresana.Los incidentes violentos comenzaron en la noche del sábado al domingo en el País Vasco y en Navarra. Dos de ellos afectaron a la sede del PNV en Gernika (Vizcaya) y a la de EA en Hernani (Guipúzcoa). En el primer caso, unos desconocidos arrojaron piedras contra los cristales. En el segundo, los alborotadores, encapuchados, rompieron los vidrios de las ventanas, lanzaron al interior un cóctel mólotov y varios más contra las patrullas de la Ertzaintza que acudieron al lugar. El fuego causó daños estimados, en principio, en unos dos millones de pesetas.
El alcalde de Hernani, José Antonio Rekondo (EA), no ocultó su indignación. "Los aprendices de jemeres rojos [guerrilla maoísta responsable del genocidio en Camboya a finales de los años 70] y su organización, el MLNV [Movimiento de Liberación Nacional Vasco], pretenden aplicar en Euskadi la sociedad del hacha, cortando las ideas e incluso las cabezas a quienes se oponen a su totalitarismo".
"Es evidente", agregó Rekondo, "que nos quieren engañar utilizando un ropaje nacionalista cuando sus fines son otros. Porque ¿cómo se puede considerar nacionalista al que busca ofrecer un holocausto al nacionalismo genuino y legitimado por una historia de defensa de las libertades y de la identidad política de Euskadi?".
A su vez, el portavoz de EA, Rafael Larreina, manifestó que aquellos que atacan la sede de un partido buscan "imponer el miedo, recortar las libertades y hacer desaparecer las formaciones políticas". Larreina instó a los dirigentes de Herri Batasuna (14B) y del MLNV "a reflexionar, si son capaces, sobre la política que están siguiendo e impulsando, dando cobertura y jaleando este tipo de acciones". A su juicio, la actitud de HB demuestra su escasa voluntad de diálogo: "Si quiere apostar por esa vía, tiene que desmarcarse claramente de esa estrategia de la violencia , . "Quienes les votan", concluyó, "deben pensar que apoyan la negación de la democracia y de las libertades y el enfrentamiento civil de los vascos".
Precisamente, Patxi Zabaleta, parlamentario navarro de HB y ex miembro de su Mesa Nacional, ha criticado este fin de semana el apoyo prestado a la violencia callejera y lo ha calificado de "un error" que puede derivar en que su formación se convierta en "un movimiento infantil".
Por otra parte, también en Guipúzcoa, un autobús fue apedreado, lo que supuso la rotura de algunas de sus ventanillas, en Lasarte-Oria. La estación de Renfe en Andoain fue atacada con artefactos incendiarios y ardió la zona de las taquillas.
Una sucursal de Argentaria en Vitoria también fue objeto de una explosión, que produjo un fuego que afectó a su fachada principal y a dos establecimientos contiguos, aunque fue rápidamente sofocado por los bomberos. En Pamplona, diez contenedores fueron quemados entre la noche del sábado y la madrugada del domingo. En torno a la una y media de la mañana, varios desconocidos lanzaron también tres o cuatro cócteles mólotov contra las dotaciones de la Policía Nacional que realizaban labores de vigilancia en la plaza del Castillo, pero no causaron daños ni personales ni materiales.
Declaraciones en la Audiencia
El juez Javier Gómez de Liaño sólo ordenó en la madrugada de ayer el ingreso en prisión de dos de los diez presuntos miembros de comandos Y puestos a su disposición el sábado tras ser detenidos el jueves en Bilbao. Los otros ocho quedaron en libertad sin fianza. Ayer tarde ordenó el traslado a la prisión de Valdemoro de Aitor Diez Aldama, quien se negó a prestar declaración ante el magistrado. Díez Aldama tendrá que volver hoy a la Audiencia. El juez tenía previsto tomar declaración anoche a otros siete presuntos miembros de los grupos Y.El secretario general de Unidad Alavesa (UA), Pablo Mosquera, mostró ayer su perplejidad ante la decisión de dejar en libertad a ocho presuntos integrantes de los grupos Y. Mosquera se preguntó: %Cómo es posible que la policía detenga a unos individuos que hacen barrabasadas y que el juez inmediatamente los deje libres. En su opinión, o los agentes "se equivocan" o los magistrados viven "en otra galaxia". Por todo ello, anunció que su partido pedirá explicaciones A su vez, la vicesecretaría de UA Enriqueta Benito, exigió "menos palabras y más hechos" para combatir la violencia callejera.
En las operaciones del jueves en Bilbao, efectuadas por la Policía Nacional y por la Ertzaintza también se registró una oficina situada en el casco viejo en la que presuntamente se reunían los de tenidos para planificar sus actuaciones, así como dos lonjas y ocho domicilios particulares. Así, se localizaron ordenadores doce cajas de diverso material numerosos disquetes y documentos, propaganda de ETA y material utilizado para practicar el terrorismo urbano.
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