El PSOE imputa dos escándalos al PP como respuesta al 'caso Ferrer '

Madrid - 18 ene 1997 - 00:00CET

La crispación ha estallado en la Asamblea de Madrid una semana antes de que se abra el nuevo periodo de sesiones. Se avecina una batalla política cargada de presuntos escándalos. La espoleta que ha activado esta guerra que ayer se declaró ha sido la investigación encargada por el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, sobre cuatro contratos (15 millones en total) adjudicados por el gobierno de Joaquín Leguina al grupo empresarial Ferrer.Estos expedientes han sido enviados por el ejecutivo de Alberto Ruiz-Gallardón al Tribunal de Cuentas con un informe de la Intervención General que apunta algunas irregularidades (presentación de ofertas que pertenecían al mismo grupo empresarial, talones con el mismo número y fecha, estudios que no se encuentran ... ). El ex presidente regional Joaquín Leguina respondió ayer a este ataque enviando al Tribunal de Cuentas la fotocopia de uno de los estudios que el actual gobierno no ha sido capaz de encontrar.

El desenlace del caso Ferrer ha vuelto- suspicaces a los socialistas. El grupo parlamentario que preside Jaime Lissavetzky reclama al ejecutivo regional una nueva investigación para determinar si altos cargos de la Comunidad de Madrid nombrados por el PP han favorecido con su gestión a determinados compañeros de partido en expedientes públicos relacionados con nuevas promociones inmobiliarias en Aravaca.

Los socialistas rescatan así el caso Aravaca, sobre el que pasaron de puntillas en el pasado periodo de sesiones cuando preguntaron por las recalificaciones aprobadas por el Partido Popular en esa zona.

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Decepción

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Los medios públicos han dado una amplia cobertura a este tema desde que el diario El Mundo comenzó a publicar las denuncias sobre Ferrer Europa. Ayer, en el telediario de la Primera Cadena de TVE de las tres de la tarde, y en el mismo paquete que en la información sobre Filesa, se recogió la versión de dicho periódico, unas declaraciones de Leguina y a continuación, sobre unas imágenes de Jesús de Polanco y de Juan Luis Cebrián, presidente y consejero delegado de PRISA, respectivamente, se leyó: "Uno de los accionistas de Tlaloc, el grupo Timón, ha reiterado hoy en una nota la falsedad de las informaciones difundidas sobre la participación de su presidente, Jesús Polanco, presidente también de PRISA, en las actividades de Ferrer Europa".La nota a la que hacía referencia TVE es más amplia y denunciaba la sistemática manipulación de este caso por parte de la televisión pública: "Los grupos PRISA y Timón reiteran la falsedad de las informaciones difundidas sobre la participación de su presidente en las actividades de Ferrer Europa. Quieren denunciar la manipulación informativa que se ha instrumentado en torno a este caso sirviendo a una campana de difamación contra los medios independientes que no se doblegan a directrices del Gobierno. Tres notas anteriores enviadas a TVE desmintiendo dichas falsas imputaciones fueron silenciadas por el Ente Público. Es intolerable que los medios de comunicación del Estado se pongan al servicio de estas campañas".

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