Duran Lleida logra el total apoyo de su partido a la estrategia de marcar diferencias con Pujol

Josep Antoni Duran Lleida obtuvo ayer el total apoyo del 20º Congreso de Unió Democrática de Catalunya (UDC) a su política de fortalecer el viejo partido democristiano catalán fundado en 1931, en muchos casos con planteamientos estratégicos no coincidentes con los de sus socios de Convergéncia (CDC). En presencia de una amplia delegación de CDC, Duran defendió con ardor la política unitaria para ampliar el autogobierno de Cataluña, una estrategia que Jordi Pujol no sólo no comparte, sino que critica. Unió aprobó las condiciones para participar en el Gobierno de España.

Los congresistas dieron su apoyo a una estrategia que supone mantener e incluso aumentar su implicación en la política española, pero un tercio del plenario votó ayer una enmienda que propugnaba la independencia de Cataluña. Hace un mes, en el congreso de CDC, la propuesta de convocar un plebiscito independentista no logró los votos necesarios para llegar al pleno. La posición oficial de Unió sigue siendo la defensa de un modelo de Estado que sea confederal en cuestiones de lengua, cultura y derecho civil propio, federal en los temas económicos y autonomista en todo lo demás. Como ya se esperaba, el congreso apoyó con votaciones que superaban siempre el 98% una política estratégica destinada a destacar la personalidad propia y no subsidiaria de Unió frente a su poderoso socio de coalición.

Las diferencias

Esta política diferenciada defiende la conveniencia de que CIU no monopolice la representación externa de Cataluña ni la primogenitura del catalanismo, sino que promueva una acción unitaria de todos los partidos catalanes para negociar con el Gobierno central unas mayores cotas de autogobierno y, a largo plazo, la reforma del Estatuto y de la Constitución; fija las condiciones para una eventual participación de Unió en el Gobierno español; propone una modernización de las bases teóricas del nacionalismo catalán (lengua, cultura, historia y territorio) Poniendo más el acento en la mejora de las condiciones de vida de la población, y propugna una descentralización territorial del Gobierno de la Generalitat catalana. Jordi Pujol ya ha anunciado que en los próximos días dará su opinión, que se espera crítica, sobre la política aprobada en este congreso. Convergéncia ha desacreditado la política unitaria porque considera más útil mantener la negociación bilateral entre CiU y el Gobierno de turno. El lunes 16 se reunirá el comité de enlace de la coalición para debatir estas discrepancias.

Dirigiéndose implícitamente a la delegación de CDC que asistía a la clausura del congreso -de la que no formaba parte Jordi Pujol, aunque sí su número dos en el Gobierno catalán, Xavier Trias-, Duran defendió la política unitaria con el argumento de que así el Gobierno de la Generalitat tendrá más fuerza para negociar con la Administración central las mejoras autonómicas y financieras. Aunque hizo votos por la continuidad de la coalición, recordó que Unió es el 25% de CiU, pero no el 25% de Convergencia. Unió ha expresado su "firme propósito" de continuar trabajando en el marco de la coalición con CDC, pero "quiere dejar claro que no supedita su política y su estrategia a CDC", según aprobó el congreso.

El texto en el que se aborda la hipótesis de una participación de Unió en el Gobierno español señala: "A partir de nuestra razón de existir como partido político, que no es otra que Cataluña, sus derechos colectivos y el compromiso con todos y cada uno de sus ciudadanos y ciudadanas, derivada de nuestro sentido comunitario, expresamos nuestra voluntad de no excluir la participación en el Gobierno del Estado. No es ninguna prioridad, ni menos aún constituye un objetivo concreto, pero una vez resuelto el problema del encaje de Cataluña respecto al resto del Estado de forma satisfactoria, con la que Cataluña se sienta cómoda, comprendida y respetada por todos, Unió Democrática de Catalunya estaría abierta a estudiar la posibilidad de participar en el Gobierno de España".

El texto precisa que estas condiciones no se dan hoy con el PP ni se dieron en el pasado con el PSOE y matiza que mientras exista CiU nada se hará de espaldas al socio: "Una decisión así en el seno de la coalición no puede tomarla ninguno de los dos partidos que la integran sin la concordancia con el otro".

La relación con el PP

Al presentar ayer su candidatura a la reelección, Duran quiso salir al paso de las hipótesis que sitúan a Unió como futuro aliado orgánico del PP, al estilo de la Unión del Pueblo Navarro. "Unió", dijo, "no admitirá nunca ningún tipo de dependencia política respecto a otra fuerza del Estado. Nunca perderá su soberanía, que sólo ha aceptado compartir con CDC en el marco de una coalición nacida para conducir la recuperación nacional de Cataluña". Una moción acordada por el congreso se opone a que en las nuevas matrículas de automóviles sea obligatorio que figure la E de España junto a la bandera de Europa. Se propone que las matrículas recojan, por el contrario, los símbolos de las cuatro naciones que según los proponentes coexisten: Cataluña, España, Euskadi y Galicia, y se da un mandato a los diputados de Unió en Madrid para que hagan respetar los sentimientos nacionales, a su juicio vulnerados por el proyecto de nueva matrícula.

El congreso aprobó también apoyar que las federaciones deportivas catalanas puedan afiliarse internacionalmente, pero obvió reclamar un comité olímpico catalán por no ser posible de acuerdo con los estatutos del COI.