La subida salarial pactada para 1997 baja al 3% pero no llega a la recomendada por Rato

Un millón de trabajadores tienen cerrados ya sus convenios para el próximo año con un aumento salarial medio del 3%. Esa cifra supone una significativa caída respecto a los convenios de este año, que se han negociado en el 3,8% de media, aunque el Ministerio de Economía y el Banco de España recomiendan subidas algo más moderadas y próximas a la previsión de inflación para 997 -2,6%-. En algunos convenios sectoriales, no en los más importantes, reaparecen los aumentos según la inflación pasada, fórmula abandonada por inflacionista en los Pactos de la Moncloa.

1997 será el año de la obsesión por la inflación para los responsables económicos. Maastricht manda y los convenios van a ser examinados con lupa. La senda en la que se van a mover está ya apuntada por un millón de asalariados que tienen cerrados sus convenios, del total de seis millones de trabajadores sujetos a negociación colectiva. Aunque aún no hay datos oficiales, y el Ministerio de Trabajo no los tendrá hasta finales de enero cuando conozca la inflación real de este año, datos recogidos en las federaciones de industria de UGT permiten afirmar que el incremento medio pactado es el 3%. Se trata de 22 convenios sectoriales que afectan a 800.000 trabajadores, a los que se suman otros acuerdos de empresa con 200.000 trabajadores más.Los tres convenios más importantes y que no dejan dudas sobre el montante de los aumentos salariales pactados para el próximo año son los del sector textil, cajas de ahorro y banca privada, que reúnen un total de 497.000 trabajadores, y han pactado el IPC previsto los dos primeros y un 3% el tercero.

De los 22 convenios sectoriales analizados, y que agrupan a 800.000 trabajadores, once recogen incrementos salariales iguales al IPC previsto -2,6%-, la mitad con cláusula de revisión. Se trata de los sectores textil (262.000 trabajadores); cajas de ahorro (87.000); pastas papel y cartón (20.000); perfumería y afines (20.000); cooperativas de crédito (11..472); marroquinería y artículos de viaje (8.000); frío industrial (8.000); pastas alimenticias estatal; cárnicas; industrias lácteas; y sastrería y camisería. Cinco se han pactado con el IPC más 0,2-0,5 puntos. Son los sectoriales de banca (148.000 trabajadores); vidrio y cerámica (50.000); mataderos de aves y conejos; helados; y metalgráficas.

En otros cinco su referencia es la inflación pasada, es decir el incremento de precios real de 1996 que parece casi seguro se sitúe en el 3,4%-3,5%. Han firmado con esa fórmula, los sectores de corcho; madera; derivados del cemento; limpieza de edificios y locales de Madrid; y la industria siderometalúrgica de Madrid. Y el convenio restante, la hostelería de Cataluña, ha pactado un aumento del 5%.

Para los sindicatos esos aumentos medios en tomo al 3% respetan una moderación salarial que ellos defienden con subidas ligeramente superiores a la inflación prevista para ayudar a la reactivación del consumo. No obstante, el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, ha recomendado públicamente, incrementos aún más bajos y en el proyecto de ley de Presupuestos para 1997 se prevé un aumento salarial según convenio del 2,5%. Una recomendación similar a la de los responsables del Banco de España, quienes sostienen que el actual ritmo de crecimiento de los salarios -el 3,8% de 1996- es "incompatible" con la reducción de la inflación a las tasas que exigen los criterios de convergencia para 1997.

Es un dato importante que en cinco convenios sectoriales se recojan aumentos sobre inflación pasada, un modelo desechado a partir de los Pactos de la Moncloa porque se consideraba inflacionista y que expresamente desapareció en el Acuerdo Marco Interconfederal de 1980. Ese resurgir se explica desde los sindicatos por las instrucciones dadas desde CEOE para que desaparezca la cláusula de revisión. Esa cláusula, que llegó a alcanzar al 90% de los trabajadores en 1992, ha caído al 53% en 1994 y al 65% en 1995 y 1996, pero algunos comités lo han compensado negociando sobre seguro. El fenómeno era más grave a finales de los setenta, con una inflación del 20%, pero ahora no deja de ser preocupante para algunos responsables de CEOE y previsiblemente sea un tema a analizar.