Los culebrones ocupan más de cinco horas diarias en la programación de TVE-1
Los culebrones invaden La Primera de TVE. Tras la reducción de programas de este tipo que se produjo en los últimos años, ahora vuelven a ocupar amplios espacios en la primera cadena de la televisión estatal. Casi una cuarta parte de la programación diaria de la misma está ocupada por telenovelas de origen latinoamericano: de lunes a viernes, este género proporciona más de cinco horas y media diarias.
La audiencia de los culebrones en una de las más estables. Abigail, es seguido por una media de 336.000 espectadores (en torno al 28%). La sesión continua de sobremesa (más de dos horas y media seguidas de serial) atrae a casi dos millones de espectadores (24%), según los datos proporcionados por RTVE.
La ración diaria comienza con un capítulo doble de Abigail, telenovela de origen venezolano protagonizada por Catherine Fullop y Fernando Carrillo, que ya pasó por las pantallas de TVE hace varios años. Se estrenó en horario de sobremesa y contó con una audiencia millonaria. En su reposición los datos son más discretos.
Tras la suspensión del magazine de tarde presentado por Ramón García, el pasado octubre, TVE ha ampliado la presencia de Café con aroma de mujer, que narra la historia de amor entre Gaviota y Sebastián Vallejo, miembro de un distinguido clan cafetero. Todo aliñado con intrigas, venganzas, viejas rencillas, amores y desamores. La Primera emite una triple dosis diaria de este serial colombiano. En total, llena la pantalla durante dos horas y 45 minutos (de 15.45 a 18.30).
Todo ello eleva la dosis de culebrones a cuatro horas y 25 minutos diarios durante el tiempo de emisión diurna. A ello se agrega otra ración adicional de madrugada. Tras el reciente pase de María Mercedes, Kaína (la tierra) llena el vacío dejada por aquella. Se trata de una reposición que sale al aire alrededor de las cuatro de la madrugada. medio camino entre el melodrama y la aventura, el serial gira en torno a un triángulo amoroso formado por dos mujeres apasionadas y vehementes y un hombre aventurero. A diferencia de otros culebrones, cuya acción se desarrolla entre las tres paredes de un plató televisivo, un 80% de las imágenes de Kaína han sido rodadas en la selva amazónica.
Son productos de bajo coste y su elevado número de capítulos permite llenar la programación sin necesidad de invertir grandes sumas.
El boom de los culebrones estalló a principios de esta década, cuando producciones como Cristal y La dama de rosa conquistaban en la sobremesa de TVE-1 audiencias millonarias (por encima de los ocho millones de adeptos). Las cadenas privadas se subieron al carro y llenaron sus parrillas de interminables seriales latinoamericanos. Ahora, tanto Antena 3 como Tele 5 han renunciado al género y han apostado por series cómicas y telefilmes melodramáticos para cubrir las franjas horarias en las que la audiencia potencial escasea.
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