Cebrián critica la política autonómica y audiovisual de Aznar
El consejero delegado del grupo PRISA, Juan Luis Cebrián, criticó ayer la política autonómica de José María Aznar y los contornos intervencionistas de la política gubernamental en las comunicaciones. Cebrián lamentó que, tras la firma de los pactos con los nacionalistas, los pasos acordados no contribuyen a la conformación de un nuevo concepto de Estado plurinacional "y amenazan con atizar grandemente el espíritu disgregador e insolidario que anida en todo sentimiento nacionalista".Cebrián, que pronunció en el Círculo Financiero de Barcelona una conferencia titulada Balance de seis meses, analizó el conjunto de la política del Gobierno del PP desde su toma de posesión, en mayo pasado. Según Cebrián, la ausencia de una tarea didáctica "por parte del PP a la hora de explicar su nueva política autonómica se debe probablemente a que tal política no existe". Sólo, prosiguió Cebrián, se puede evitar una carrera de agravios mutuos si se pacta un modelo estable de Estado autonómico, que no quede al albur de la matemática electoral y que dé garantías de continuidad a un "Estado unitario y democrático, en un marco de solidaridad".
Cebrián enumeró las metamorfosis del PP. "Se anunciaron como liberales, pero florece el intervencionismo en las grandes decisiones económicas. La sensación de que en algunos sectores clave se viene legislando para favorecer intereses particulares o pagar favores personales o institucionales se encuentra muy extendida", afirmó, antes de advertir sobre la articulación de un sistema financiero en tomo a dos grupos y el amiguismo en muchos nombramientos.
En su análisis de la política audiovisual, Cebrián recordó cómo el PP pasó de prometer la reducción y la posible privatización de TVE a "embarcarla en un proyecto inversor de dudoso futuro a corto plazo y que precisa de enormes cantidades de capital". Posteriormente, analizó el proyecto gubernamental de plataforma de televisión digital, que recuerda la voluntad del imperio -esta vez mediático- que el antiguo régimen predicara. Cebrián afirmó, sin embargo, que la decisión de transformar el proyecto digital de la deficitaria TVE en el de Telefónica, sobre el que mantiene sus reservas, "ha adquirido mejores perfiles profésionales". Lo preocupante, concluyó, no es su contenido, sino el talante intervencionista. En el apartado económico, destacó la credibilidad generada por los presupuestos para 1997.
