"Estos te llevan gratis"

La marcha fúnebre se adueñó ayer del centro de Madrid. Unos 200 coches, venidos de distintos puntos de España, se manifestaron a mediodía pr la "liberalización verdadera" del sector y contra las "exigencias abusivas" impuestas por los ayuntamientos. Al final, dejaron coronas ante el Ministerio de Economía, donde encontraron "apoyo", según los convocantes. Un portavoz del departamento aseguró que el ministerio "comprende" la protesta. "Seguiremos atentamente los pasos de la liberalización [en manos municipales]", añadió.Los convocantes, la Asociación Funeraria de España (Afues, que según sus datos agrupa a 3.200 pequeñas y medianas empresas), piden que los ayuntamientos no les impongan requisitos "inalcanzables" para poder operar en las grandes ciudades. El Gobierno decidió en junio abrir este sector a la libre competencia. Ahora son los consistorios en algunos casos propietarios de las empresas fúnebres, que venían operando en régimen de monopolio- los encargados de regularla. Y lo hacen en favor de los monopolios ya existentes o de las grandes empresas, según los manifestantes.

La secretaria de AFUES, Natalia Diéguez, se entrevistó al finalizar la marcha con el director general de Política Económica y Defensa de la Competencia, Luis Albentosa. "Nos ha dado la enhorabuena por defender los intereses generales. Nos vamos a reunir con el ministro Rato para estudiar como liberalizar de forma efectiva el mercado", señaló.

El optimismo de Diéguez no era en vano. El ministerio se ha mostrado receptivo a su protesta, que el propio alcalde denostó ayer: "Si [los funerarios] creen que mediante una exteriorización a base del mal gusto de pasear los coches fúnebres por las calles van a torcer mi voluntad, van listos". También les recomendó que recurran la ordenanza municipal, cosa que Afues piensa hacer. La normativa pide a las empresas que quieran ejercer tener 30 coches y 4.000 ataúdes.La marcha, que partió del paseo de los Melancólicos, no provocó grandes problemas de tráfico. Una carroza negra tirada- por dos caballos -alquilada a una empresa de atrezo por 200.000 pesetas- abría el cortejo. Tras ella, unos 200 coches fúnebres (192 según la Policía Nacional o 300 según la Municipal: muy lejos de los 2.000 anunciados por la organización). Venidos de casi toda España, un par de ellos no resistieron dos horas (seis kilómetros) en primera velocidad llegaron en grúa ante Ministerio de Economía Allí despositaron dos centenares de corona con la leyenda "libertad verdadera".

Un grupo de gaiteros de Orense y otro de dulzainas amenizaron la marcha, que sobrevolaron, dos avionetas con pancartas reivindicativas. Los peatones reaccionaron con sorpresa. Hubo crítico con "el paseo de la muerte" e ir irónicos: "Te puedes morir del susto", dijo un hombre. "Sí, pero éstos te llevan gratis", contestó otro.