El Cesid y la policía alertaron hace meses sobre la actividad de la mafia rusa en Marbella

El Cesid y la policía alertaron hace meses sobre el desembarco en Marbella de las mafias rusas y de otros países del Este de Europa. Entre las actividades citadas en los informes están la prostitución organizada mediante empresas turísticas, la extorsión, el narcotráfico y el blanqueo de capitales. Las excelentes relaciones con las autoridades rusas de Jesús Gil, cuyo hijo creó la empresa La Casa Rusa Hispana con diplomáticos de aquel país, no han impedido el arraigo de delincuentes de altos vuelos en la Costa del Sol. La realidad descrita por las fuerzas de seguridad desmiente el análisis de Gil: Marbella no es lugar de descanso de delincuentes internacionales, sino su centro operativo.

Sólo a principios de este año Interior se tomó en serio un problema ya apuntado por los servicios secretos el año anterior: la implantación en la provincia de Málaga, especialmente en Marbella, de las mafias del Este de Europa. En un informe de 1995, el Cesid alertaba: "Marbella constituye un importante centro de atracción de ciudadanos rusos con muy alto poder adquisitivo que utilizan esta localidad como lugar de descanso de sus actividades ilegales y para escapar de la acción de la Justicia de los países en los que operan. Su estancia en Marbella les sirve para contactar con otros mafiosos europeos con los que pueden llegar a colaborar en la comisión de operaciones ilícitas".Las cifras dan idea del explosivo atractivo que encuentran los rusos en la Costa del Sol: en 1994 llegaron a Málaga 3.512, y en 1995 la cifra se multiplicó casi por siete: 23.436.

Un informe policial de 1996 señala que "uno de los puntos de asentamiento y actuación más importantes de delincuentes organizados de los países del Este lo constituye la provincia de Málaga. En los últimos tres años se ha detectado en esta capital y en parte de sus poblaciones costeras un incremento considerable de ciudadanos de estos países, algunos de ellos delincuentes, entre los que destacan los de origen rumano, yugoslavo y, más recientemente, ruso".

Los primeros delincuentes del Este detectados en la Costa del Sol eran rumanos especializados en "la recluta de mujeres, muchas veces compatriotas, bajo supuestos contratos de trabajo en actividades artísticas y deportivas", que, según el informe policial, eran obligadas a ejercer la prostitución.

Vinculaciones internacionales

Las redes delictivas reaccionaron ante la acción de las fuerzas de seguridad orientando sus actividades hacia el blanqueo de dinero negro. Se detectó en la Costa del Sol "un incremento de ciudadanos de la antigua Yugoslavia, relacionados en principio con el tráfico de armas y el de estupefacientes", que desde territorio malagueño se volcaron en el blanqueo de capitales. También se comprobó su vinculación a grupos mafiosos franceses y alemanes, y la existencia de conexiones con el narcotráfico latinoamericano, así como la extorsión a la que sometían, con la amenaza de armas de fuego, a ciudadanos con alto poder adquisitivo de la zona. El informe es claro: "Su asentamiento principal es la zona de Marbella, más concretamente Puerto Banús".Sin embargo, según el informe, el incremento más llamativo en los últimos tiempos en la Costa del Sol, y particularmente en Marbella, ha sido el de ciudadanos rusos. Este crecimiento está motivado por un turismo estacional, canalizado por una decena de empresas que en ocasiones han despertado sospechas de actuar en connivencia con redes delictivas, y un turismo residencial de gran poder económico y que participa en importantes operaciones inmobiliarias."Este tipo de asentamiento ha despertado la atención policial, al desconocer el origen del dinero, y, por lo tanto, sospechar de posibles operaciones de blanqueo, máxime si se tiene en cuenta la proliferación de empresas dedicadas al asesoramiento financiero", se afirma en el informe. Las redes ofrecen al turista ruso "asistencia jurídica confidencial, permisos de residencia, créditos bancarios, inversiones inmobiliarias, creación de empresas mixtas". Todo ello es a veces pura tapadera de actividades delictivas.

"Se ha tenido constancia de la actuación de grupos organizados de origen ruso entre cuyas principales actividades delictivas está la extorsión, exigiendo al estilo mafioso entre un 10% y un 15% de sus ganancias de los negocios. Los autores suelen utilizar documentaciones falsas a cuyos nombres se abren cuentas corrientes en paraísos fiscales".

Otro campo es la prostitución a gran escala: "Se ha detectado un incremento de mujeres de Ucrania y las antiguas repúblicas bálticas que ejercen la prostitución sobre todo en la zona de Marbella, la mayoría de las cuales son controladas por estas redes en España, camufladas entre grupos de turistas gestionados por tour operadores".

Asesores inmobiliarios

También existen abogados en Marbella cuya principal actividad es asesorar a los inversores rusos, al tiempo que poderosos bancos privados de Rusia realizan desde sedes gibraltareñas operaciones inmobiliarias a través de intermediarios. Sin relacionarlo en ningún momento con actuaciones delictivas, en los informes policiales se vincula con estas grandes inversiones rusas a un conocido hombre de la alta sociedad marbellí: el libanés Raymond Nakachian, amigo de Jesús Gil.La policía considera que "una de las formas utilizadas por los delincuentes para blanquear dinero es la asistencia a casinos de juego, al objeto de poder justificar mediante supuestas ganancias el dinero que poseen". Según un estudio, 2.200 rusos acudieron el año pasado al casino Torrequebrada, de Benalmádena, y otros 2.400 visitaron el de Marbella.