El muchacho que cayó al vacío en Móstoles huía de vivienda ajena

David Marcos, de 18 años, el muchacho de Móstoles (199.400 habitantes) que murió en la madrugada del domingo al caer desde la terraza de un quinto piso, se precipitó al vacío al tratar de escapar de una vivienda ajena a la que penetró, por error, con un amigo para gastar una broma, según el Cuerpo Nacional de Policía.Esta versión de los hechos contrasta con las primeras hipótesis policiales (véase El País Madrid de ayer), que señalaban la terraza del vecino como lugar de paso para saltar a otro balcón donde se celebraba una fiesta.

Una vez en el interior del piso hicieron ruido y despertaron al dueño. Éste dijo ayer a EL PAÍS que sorprendió a ambos muchachos con la nevera abierta y dos botellas sobre la mesa. "Les pregunté quiénes eran y qué hacían, y, sin. responder, salieron corriendo en direcciones distintas", afirmó el propietario del piso, que desea mantener su nombre en el anonimato.

La víctima huyó hacia la terraza, mientras que su amigo buscó la salida dentro de la vivienda. Al llegar a la puerta de entrada, los nervios le impidieron quitar las llaves de la cerradura, lo que dio tiempo al propietario a acercarse a él y volver a preguntarle. "Sólo me decía que le perdonase, que estaba mal y que le diera la mano. Me comentó que tenía 17 años y le dejé marchar", aclaró este vecino.Después se dirigió a la terraza para comprobar dónde se había escondido David y se encontró con el chaval muerto en la calle. La explicación de la policía es que este muchacho "se asustó, calculó mal y se precipitó al vacío". El paso entre una y otra terraza está separado por anchas mamparas y un rodapié cuya anchura no supera los diez centímetros.

Algunos testigos que vieron caer a David aseguran que tocó un toldo abierto de los primeros pisos y por eso cayó en trayectoria diagonal. "Se desplomó en el suelo boca arriba y empezó a salirle sangre por la cabeza", explicó un joven, 1 que se encargó de taparle con una sábana.