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Expertos en esquizofrenia debaten sobre la causa genética de esta psicosis

El X Congreso Mundial de Psiquiatría revisa el tratamiento de los pacientes

La esquizofrenia fue objeto ayer de atención en el X Congreso Mundial de Psiquiatría, que reúne en Madrid a más de 10.000 especialistas. Fueron debatidas las posibles causas genéticas de esta enfermedad y expuestas las novedades en el enfoque de su tratamiento y las hipótesis sobre su base neurológica. Olvidadas quedan las teorías psicoanalíticas, sobre el origen de la esquizofrenia, que afecta en el mundo a unos 45 millones de personas, y los estudios se vuelcan en sus bases físicas y en la incorporación de nuevas pautas de tratamiento farmacológico y psicosocial.

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El origen de la esquizofrenia, una de las psicosis más frecuentes, sigue siendo un misterio para los especialistas que, sin embargo, conocen cada vez más las características y las posibilidades de control de esta enfermedad que incapacita a los que la sufren para una vida normal y está acompañada algunas veces de comportamiento violento.Timothy Crow, un experto británico en esquizofrenia, es de los que creen en la base genética. Afirma que se ha encontrado una incidencia muy similar de la enfermedad en países muy distantes entre sí, lo que le lleva a enunciar la hipótesis de una mutación genética que surgió con el Homo sapiens hace entre 137.000 y 250.000 años. Otro dato que apoya su teoría es la edad de aparición de los síntomas, a partir de los 15 años en los hombres y los 20 años en las mujeres. Se pregunta por qué no desapareció esta mutación por la selección evolutiva y concluye que debe ser útil para algo y es transmitida por toda la población: "La psicosis y el lenguaje tienen un origen común en el proceso de especiación", concluye, recordando las anomalías cerebrales encontradas en esquizofrénicos

Sin historia familiar

Su colega Robin Murray lleva años polemizando con él y ayer lo hizo en Madrid. Coincide en que un desorden del lenguaje es crucial para el desarrollo de la esquizofrenia pero no en que los datos esgrimidos por Crow tengan significado estadístico. Con los avances en genética se extraña de que no se haya descubierto la supuesta causa genética única para la esquizofrenia y recuerda que la mayor parte de los esquizofrénicos no tienen historia familiar de esta enfermedad. Se inclina por la hipótesis de una causa múltiple, como sucede con otras enfermedades corrientes como el cáncer y la diabetes, una combinación de predisposición genética y factores ambientales, y entre ellos los relacionados con el embarazo, como que la madre sufra gripe durante él o que el parto sea prematuro.Y además, basándose en los da tos históricos, Murray se inclina por la hipótesis de que la esquizofrenia no ha existido siempre, sino que es una epidemia surgida hace unos 200 años, cuando empiezan a crecer las ciudades y aumenta la transmisión de infecciones, lo que apoya su hipótesis de un factor vírico.Los pacientes esquizofrénicos sufren alucinaciones y trastornos de comportamiento, pero también falta de motivación y otras pautas negativas. Los nuevos tratamientos con antipsicóticos han cambiado su vida pero no son la panacea, según expusieron ayer varios expertos, en su mayoría anglosajones. Según el estudio más completo, pasados 30 años, un 20% se cura y un 54% presenta pocos síntomas pero en éstos últimos las recaídas siempre son una amenaza.

El tratamiento óptimo consistiría en una medicación, acompañada de terapia psicosocial y servicios comunitarios Completos, lo que quiere decir personal dispuesto las 24 horas del día para atender al enfermo, en todas sus necesidades. Así y todo, con esta atención continuada se ha visto mejora en todos los aspectos menos en los relativos a la violencia y el suicidio (un 28% lo intenta y un 10% lo consigue) y a las relaciones sociales, lo que indica que hay algo en la enfermedad que todavía escapa al control de los médicos. Muchos esquizofrénicos tienden al abuso del alcohol y otras drogas, lo que complica el tratamiento.

Un experto de Pittsburgh (EE UU), G.E. Hogarty, señaló que la terapia, personal avanzada ayuda significativamente a la acción de los fármacos una vez estabilizada la enfermedad (al año de su aparición) mientras que por sí sola no sirve para nada. Además se han observado efectos negativos de estas terapias en los pacientes que viven solos.

Para el futuro este experto propone una terapia distinta, basada en la observación de que la capacidad cognitiva del esquizofrénico es similar a la de los niños de entre 7 y 10 años, lo que indica que ha sufrido un parón en su desarrollo.

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