La nueva sede de la Asamblea en Vallecas se queda pequeña antes de su inauguración

La mesa de la Asamblea de Madrid -órgano compuesto por siete diputados que gobiernan la Cámara regional- ha descubierto que la nueva sede que construyen Vallecas se ha quedado pequeña antes de su inauguración. Ayer visitaron las obras y ratificaron sus sospechas: el salón e plenos proyectado (un cubo transparente) agota la mayoría de la edificabilidad de la parcela y mantiene las estrecheces que actualmente sufren los grupos parlamentarios. A 11 meses de la inauguración de la nueva sede se ha empezado a estudiar la construcción de otro edificio rectangular.

Intentan los diputados ajustar los gastos para que el presupuesto final de la obra ¿le la nueva sede no supere la cantidad fijada en el concurso para su construcción.Varios problemas preocupan a los parlamentarios. Primero: ¿Cómo ampliar la sede sin disparar su coste? Solución: "Como el presupuesto de licitación de la nueva sede fue de 2.901 millones y la adjudicación final se hizo por 2.640, aún nos queda un remanente de 260 millones para acometer la nueva obra", explica un parlamentario.

El próximo 26 de julio los diputados de la Mesa de la Asamblea analizarán los informes técnicos que han pedido y decidirán sobre el inconveniente. Urge el acuerdo: "SI aplazamos este asunto se encarecerá el precio de las obras. Ahora es el momento", explican.

La ampliación consistiría en un edificio rectangular, a unos metros de la sede en construcción, con 3.000 metros cuadrados de superficie utilizable para despachos de parlamentarios más 25 plazas de aparcamiento. Su coste en el mercado podría rondar los 300 millones de pesetas.

Coste del terreno

Segundo problema: el nuevo inmueble necesita terreno, que vale dinero. Salvo que, como ocurrió con la parcela ahora en construcción, se ceda gratuitamente a la Asamblea por parte del Ivima, su propietario. "Sería tan sólo el 15% de una parcela anexa a la que ocupa la sede en obras", señalan los diputados.

Alberto Ruiz-Gallardón, presidente de la Comunidad, y Luis Eduardo Cortés, consejero de Política Territorial, ya conocen el problema y los deseos de la Asamblea de Madrid. Cortés respondió ayer: "En principio me inclino a esta operación, aunque todavía no he dado el sí oficial. Pero el Ivima debe cobrar un precio por sus terrenos, aunque sea un precio prudente".

Con el actual proyecto en construcción, los grupos políticos anuncian graves problemas logísticos: "Todas las personas que quisieran tratar asuntos con los diputados deberían pasar, a la fuerza, por la Asamblea y junto al salón de plenos. Algunas actividades de los grupos perderían la discreción necesaria", señalan.

La obra institucional de Vallecas sería, incluso con la ampliación, más barata que la que se inició hace unos meses en el edificio de la Puerta del Sol, sede de la Presidencia de la Comunidad. La reforma del histórico inmueble costará más de 3.000 millones de pesetas.

La Asamblea de Madrid ocupa actualmente una sede de alquiler, escasa, vieja y achacosa, en el número 49 de la calle de San Bernardo. Es el único Parlamento regional de España que vive de prestado.

Las obras para el nuevo edificio comenzaron en noviembre y se retrasaron por la debilidad del terreno, que obligó a gastar más dinero en cimentación. El inmueble, cuya construcción terminará en 11 meses, tiene 17.000 metros cuadrados en cinco plantas, dos bajo rasante, donde aparcarán 193 vehículos.