Juan Fernández: "Ahora tengo dos bazas"
El Mapei se consolida como equipo que debe controlar la carrera hasta que haya nuevos descartes
Juan Fernández juega sus cartas abiertamente. Los hechos le obligan a ello. Los hechos se llaman Rominger y Olano en posición de atacar el liderato. Ayer pasó por la sala de prensa y lo dijo. Lo dijo, por fin: "Ahora tengo dos bazas, Rominger y Olano, y eso es muy importante cuando se entra en una dinámica de muchos ataques". El Mapei ha sucedido a la ONCE como el equipo a tener en cuenta, como el eje de la carrera, en competencia con el Telekom alemán. Y mucho se ha dicho del Mapei en estos últimos días porque no ha dado señales de vida hasta el momento decisivo. De todas cuantas especulaciones se han vertido, sólo el Mapei, y su particular coexistencia entre belgas, españoles, italianos y el suizo Rominger, ha sobrevivido sin pérdidas apreciables. Es el único equipo que va a jugar la siguiente partida con dos fichas para mover. Una ventaja según algunos. Un inconveniente según otros. Juan Fernández tiene trabajo por delante."Visto lo visto tengo grandes esperanzas en este Tour. Sabíamos que Berzin era muy peligroso en esta cronoescalada, pero sabemos también que debe defenderse sin equipo. Induráin y Zülle tendrán que pasar al ataque. Y el Telekom también". Juan Fernández no responde a quienes han criticado su falta de trasparencia en la primera semana: el Mapei no ha colaborado con nadie, no ha ejercido papel alguno, se ha limitado a esperar. Juan Fernández se muestra incrédulo ante tales apreciaciones. Según él, nadie ha hecho todavía nada especial. Juan Fernández nada en la abundancia para los tiempos que corren.
Su líder es Rominger. Es el líder porque es quien está más cerca del patrón, quien ha mantenido este equipo con sus éxitos y su récord de la hora. Es suizo y viaja con guardia pretoriana española. Rominger no era ayer un hombre feliz, no tuvo reparos en reconocer que el resultado de la cronoescalada no le satisfizo: "No puedo ocultar que no ha sido una gran jornada para mí. No he dado lo mejor de mí mismo. No he tenido buenas sensaciones". Rominger anunció que Induráin había demostrado que su desfallecimiento fue un hecho pasajero, pero sembró dudas sobre el porvenir: "Ha quedado un Tour muy abierto, pero tal y como van las *cosas, vencerá quien mejor sepa defenderse del frío. A lo mejor no lo consigue el más fuerte, sino aquél que soporte mejor la lluvia, el frío en las cumbres". Rominger hizo una alusión a Berzin: "Ahora debe demostrar que puede superar la alta montaña, que sabe defenderse: allí sin equipo. Ya sabíamos que era un corredor de gran clase en la contrarreloj".
Berzin es el contemporáneo de Olano, la segunda punta de lanza del Mapei. Y es curioso: Olano tiene en otra consideración al ruso, como si le moviera un sentido de la solidaridad entre las generaciones. Olano respalda la candidatura de Berzin: "Creo que ahora está al 100%. No hay duda de que ha mejorado respecto al Giro y estoy convencido de que sabrá defenderse en la montaña".
Olano, optimista
El corredor español era la otra cara de Rominger. El suizo habla menos según pasan los días. Olano habla más. "Nunca me había sentido tan bien en una cronoescalada tan exigente. Creo que estoy mas o menos igual que en el Giro".Olano se atreve también con los pronósticos: "Tal y como ha quedado la ONCE, estoy convencido de que van a pasar al ataque desde el primer kilómetro. Y van a ser muy peligrosos. Al Telekom lo veo muy fuerte y están trabajando bien sus opciones con Riis. Vamos a ver mucha batalla, porque Induráin vuelve a entrar en juego aunque en unas condiciones muy diferentes a las que está acostumbrado. Induráin debe atacar".
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