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HACIA LA PAZ EN BOSNIA

Confusa dimisión de Radovan Karadzic al frente de los serbios de Bosnia-Herzegovina

Las amenazas contra el presidente serbio, Slobodan Milosevic, de volver a implantar las sanciones que hundieron a Serbia en la miseria parecieron surtir efecto ayer. Radovan Karadzic, el incombustible líder de los serbios de Bosnia-Herzegovina, adalid de la limpieza étnica, inculpado de crímenes contra la humanidad por el Tribunal de La Haya, anunció ayer su renuncia a la presidencia de la República Srpska (RS), entidad que, según los acuerdos de Dayton, forma, junto a la Federación Croato-musulmana, la nueva Bosnia-Herzegovina. Mientras que el mediador internacional Carl Bildt anunciaba alborozado la dimisión de Karadzic, su sustituta, la ultranacionalista Biljana Plavsic, aseguraba que ésta era temporal.

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La presión conjunta de los líderes del Grupo de los Siete (los países más ricos de la Tierra) y de Rusia, así como de Bildt, lograron, en principio, que Karadzic renunciara a seguir ocupando puestos de responsabilidad política en la RS y a formar parte de la lista de su Partido Democrático Serbio (SDS) en las elecciones convocadas para el 14 de septiembre en Bosnia. Sin embargo, las dudas surgieron casi de inmediato a ambos lados del Atlántico. La Casa Blanca mantenía ciertas reservas sobre la veracidad de la renuncia de Karadzic. "No sabemos con exactitud cuál es su situación" dijo el portavoz David Johnson. "Nuestra política con respecto a él sigue siendo la que ya hemos manifestado con anterioridad: que no sólo debe estar fuera del poder sino quedarse sin influencia, ser expulsado y ser juzgado". Londres celebró el anuncio llegado de Pale, aunque se mantenía "vigilante". El Ministerio de Asuntos Exteriores francés expresó su deseo de que "la dimisión de Karadzic sea completa y definitiva". La OTAN prefirió no manifestarse.La Unión Europea (UE) se apresuró a saludar la dimisión de Karadzic como un "gran paso para la paz en Bosnia", según afirmó en Mostar Piero Passino, viceministro de Exteriores de Italia, país que hasta ayer desempeñaba la presidencia de los Quince, informa Juan Carlos Sanz desde Mostar. Tras destacar que la normalidad de los comicios municipales en la dividida ciudad del Neretva facilita el proceso electoral de Bosnia-Herzegovina del próximo 14 de septiembre, Passino sostuvo que, la salida de la escena política de Karadzic consolida la normalización de la vida política tras casi cuatro años de guerra.

El primer ministro bosnio, Hasan Muratovic, por su parte, declaró que el líder serbobosnio pretende burlarse de la comunidad internacional con su supuesta dimisión "temporal". La renuncia "es un éxito de la diplomacia de Bildt, pero no somos ingenuos en absoluto", añadió Muratovic. "Biljana Plavsic: pertenece al ala ultranacionalista, aunque carece del carisma y la autoridad de Karadzic". La propia Plavsic, hasta ahora vicepresidenta de la RS, confirmó que Karadzic no ha presentado su dimisión, sino que ha cedido temporalmente sus poderes: "Karadzic ha hecho uso de sus poderes constitucionales y cedido sus atribuciones a uno de los vicepresidentes, en este caso a mí (...), por estar incapacitado temporalmente para ejercerlas".

Un supuesto traspaso de poder más teatral que real se celebró en Pale, la capital de la RS, a finales de mayo pasado, mucho antes de la crisis actual. Bild anunció entonces que era "el principio del fin de Radovan Karadzic". De ahí que el escepticismo ante la efectiva retirada del líder serbobosnio volviera ayer a aflorar en numerosas cancillerías occidentales.

"Seguir influyendo"

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El propio Bildt indicó que "Karadzic intentará seguir influyendo por todos los medios a su alcance", algo que contraviene lo manifestado por EE UU y sus aliados. A fin de cuentas, Biljana Plavsic, conocida como la dama de hierro de los serbobosnios, es considerada como una fiel seguidora de Karadzic.Bióloga de formación y miembro del SDS desde su fundación, Biljana Plavsic, de 60 años de edad, es descendiente de una familia de la alta burguesía serbia -ortodoxa y anticomunista- de Sarajevo. Partidaria, como Milosevic y Karadzic, de la unificación de todos los serbios bajo un mismo Estado. Plavsic aprovechó sus estudios de biología en Croacia y Estados Unidos para elaborar una teoría biológica según la cual es "imposible" que serbios, musulmanes y croatas puedan vivir juntos. En septiembre de 1994, en plena guerra bosnia, declaró que deseaba "todo el mal posible" a los bosnios musulmanes.

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