HB critica el "inmovilismo" del Ejecutivo y defiende a ETA
Miles de personas secundaron ayer las manifestaciones convocadas por Herri Batasuna (HB) en las tres capitales del País Vasco y en Pamplona bajo el lema Democracia para Euskal Herria. En Bilbao, el. miembro de la Mesa Nacional Carlos Rodríguez criticó la actitud "inmovilista" del Gobierno del Partido Popular (PP) y valoró la "iniciativa política realizada por ETA" en favor de una solución dialogada al conflicto vasco con la tregua de una semana. En Pamplona, el portavoz de la coalición independentista, Floren Aoíz, aseguró ante poco más de 1.000 personas, que esta semana ha quedado claro quién quiere la paz, en alusión a ETA, al tiempo que denunció el portazo dado por el Gobierno que preside José María Aznar ante el "gesto de buena voluntad" de la organización terrorista. No obstante, Aoiz consideró como "algo positivo" el traslado de presos etarras a prisiones próximas a Euskadi.Unas hora después de que la manifestación de Elkarri se pusiera a andar, sobre las 18:25 horas partía desde la otra punta de Bilbao la marcha convocada por HB bajo el lema Democracia para Euskal Herria.
A lo largo de la marcha, en la que, participaron unas 4.000 personas, se profirieron gritos en favor de la amnistía, de la organización terrorista, y en contra de la Ertzaintza y de los medios de comunicación. En la cabeza de la manifestación se encontraban portando la pancarta los dirigentes abertzales Carlos Rodríguez, Jon Idígoras, Gorka Martínez y Tasio Erkizia.
Rodríguez se mostró muy crítico con la nueva política con los presos de ETA anunciada ayer en Vitoria por el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja. "Mayor Oreja ha ofrecido pocos datos y muy confusos", dijo Rodríguez. Argumentó que el hecho (le que a cárceles del País Vasco hayan sido trasladados únicamente dos presos (a la prisión alavesa de Nanclares de la Oca) no es más que una "maniobra (le distracción" sobre el problema de fondo que, a su juicio, "no es otro que la dispersión".
Por otra parte, minutos antes de las siete de la mañana de ayer, varios desconocidos rociaron con gasolina y prendieron fuego a una caseta propiedad de Telefónica situada en las inmediaciones de la localidad vizcaína de Otxandio. Según informó la Ertzaintza, como consecuencia del fuego y la acumulación de gases se produjo una explosión que terminó por derruir la centralita de Telefónica.
