El magistrado Gómez de Liaño se opone a su recusación por el general Galindo
El juez Javier Gómez de Liaño presentó ayer un informe en el que se opone a su recusación por el general de la Guardia Civil Enrique Rodríguez Galindo. Galindo había recusado a este magistrado por considerar que es amigo íntimo de Baltasar Garzón y que, por ello, no podía resolver con imparcialidad la primera recusación presentada por el general, que afectaba a este último magistrado.Galindo había sido citado como imputado en el caso Oñederra y eludió declarar ante Garzón al recusarlo por considerar que el magistrado tiene interés en la causa y ha sido su superior jerárquico en Interior. Garzón pasó el caso a Gómez de Liaño, quien a su vez lo entregó al sustituto legal en caso de doble recusación, Ismael Moreno. Este magistrado pidió a Liaflo que se pronunciase sobre la procedencia de la recusación de Galindo contra él.
En el informe que ya obra en poder del juez Ismael Moreno, Gómez de Liaño considera inviable la doble recusación. El magistrado alega que tomar café juntos él y Garzón, no es motivo que denote una amistad íntima que ponga en peligro su imparcialidad ni que justifique su apartamiento a la hora de resolver el incidente de recusación.
La opinión de Gómez de Liaño en el informe dirigido al juez Moreno, de folio y medio de extensión, es que procede rechazar su recusación. El juez espera ahora, antes de resolver el incidente, el correspondiente informe del fiscal Ignacio Gordillo.
Galindo se encuentra en prisión por orden de Gómez de Liaño, que le ha procesado por el secuestro, torturas y asesinato, de los presuntos etarras Lasa y Zabala, y no ha recusado a este magistrado en ese procedimiento.
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