Del paréntesis político a la boda de Smicer

Las conversaciones para formar nuevo Gobierno fueron un tema secundario en las páginas de los periódicos de la República Checa. El principal lo fue, por una vez, el fútbol, la victoria a los penaltis y el pase a la final. "Ganamos a Francia y ahora queremos la medalla de oro", fue el titular del rotativo Blesk. Toda la prensa recogió la foto de los hinchas checos celebrando el triunfo en la Plaza Wenceslao de Praga.El Mlada Fronta Dnes destacó que "los jugadores interpretaron la sinfonía de los penaltis". Los periódicos recogieron cómo los líderes políticos, incluido el primer ministro, Vaclav Havel, interrumpieron sus conversaciones sobre la formación del nuevo gobierno para presenciar la tanda de penaltis ante los franceses. Un portavoz de la presidencia checa confirmó ayer que Havel asistirá a la final de la Eurocopa en Wembley.

Antes de tan trascendental partido, uno de los futbolistas del combinado checo, Smicer, debe contraer matrimonio. Smicer no confiaba demasiado en alcanzar la final y fijó la fecha de su boda para hoy a las 12.00 horas. Pese al rigor de la concentración, la dirección de la selección checa y su entrenador, Dusan Uhrin, autorizaron al jugador a viajar a Praga para cumplir con PavIina, su futura esposa. Pero a condición de que regrese a tiempo para la siguiente sesión de entrenamiento. Su compañero Pavel Novotny, en cambio, que tenía previsto casarse mañana, no recibió el permiso.

El desenlace del miércoles también tuvo reflejo en la prensa francesa. Y en tono muy crítico. El diario deportivo L´Équipe tituló: "No merecísteis ir a Wembley". El seleccionador, Aime Jacquet, se llevó los peores ataques: "Ha construido la base del equipo para el próximo Mundial con una gran defensa pero le falta eficacia atacante".

La sombra de Cantona

France Soir tuvo recuerdos para el gran ausente, Eric Cantona. "La sombra de Cantona sobrevoló Old Trafford", tituló. "Cantona es problemático, altera, pero mete goles", sentenció el periódico francés.El líder del Frente Nacional, el ultraderechista Jean Marie Le Pen, lamentó la eliminación de la selección y comentó que el equipo "no ha tenido conciencia de ser portador de las esperanzas de la nación, que se expresa a través de nuestro himno nacional". Le Pen insistió en su opinión de considerar "deplorable" que la mayoría de los jugadores franceses no cantaran su himno, al contrario de lo que sucede en todos los grandes equipos nacionales.