El ex presidente trabaja en tres despachos

El deseo de Felipe González de no hablar del nuevo Gobierno hasta septiembre no quiere decir que esté de vacaciones, a juzgar por la actividad que desarrolla, sin publicidad, en los tres despachos con los que cuenta: en la sede federal de su partido -en la calle madrileña de Ferraz-, en el edificio de grupos parlamentarios del Congreso y en el despacho conocido por Gobelas, nombre de la urbanización, a las afueras de Madrid, donde el PSOE tiene una sede que, utilizaba como cuartel general en campañas y que ahora habita todos los días Felipe González. Ayer por la mañana, muy a puerta cerrada, el líder del PSOE reunió en este lugar a todos los secretarios generales de su partido acompañados por el secretario de Organización, Cipriá Ciscar. Sólo faltó a la cita el dirigente navarro, Javier Otano.

El día anterior González hizo doblete. Primero convocó en Ferraz a la permanente de la Ejecutiva Federal y, por la tarde, a la permanente del Grupo Parlamentario Socialista.

Los temas tratados tuvieron mucho que ver con los primeros pasos del Gobierno de José María Aznar y, sobre todo, con los decretos-ley económicos. En la reunión de la permanente del partido, Juan Manuel Eguiagaray, portavoz de la comisión de economía, desentrañó las medidas fiscales del Gobierno, en tanto que Txiki Benegas hizo balance de la gestión municipal. Según asistentes a una y otra reunión, la participación de González fue activa, aunque dejó hablar mucho a sus ex ministros.