Peor que Inglaterra
Sin elaboración. España jugó siempre sin elaboración. El balón salía expedido de los centrales hacia la Media punta de España, donde se producía la lucha de Pizzi de espaldas a la defensa mientras nuestros centrocampistas acudían al rebote. El más arcaico modelo inglés. Tenemos futbolistas para hacer otra cosa, tanto entre los que están en la isla como entre los que se quedaron en España.Defensa fallona. La existencia de algunos remates contra la puerta búlgara, tampoco muchos, no debe movernos a engaño. Bulgaria tiene una defensa fallona y confusa, con el increíble vicio de despejar balones al centro de su propia área.
Bulgaria. Lechtkov y Balakov para tansitar con urgencia y criterio en la media, contraataques rápidos, venenosos centros cruzados de Kostadinov a Stoichkov o viceversa, ante los que España nunca supo qué hacer. Velocidad. Un equipo sin terminar, pero que sabe sacar partido, de las cosas que tiene, que no son muchas.
Hierro. Lo más salvable de España. Aunque el equipo no le buscó mucho a él, él sí supo buscarse las judías. Estuvo activo, cortó, construyó dentro de lo posible, disparó con mucho peligro varias veces y fue el principal punto de apoyo del equipo cuando más falta hacía, a partir del gol búlgaro.
Lo peor. El final. Mikhailov paseando el balón por su área sin que nadie acudiese a importunarle. España daba por bueno el empate. Se supone que hemos ido a otra cosa.
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