El tren se viste de gris

Adiós al rojo chillón, a los modelos llamativos y a los díseñadores de moda. Cercanías de Renfe viste estos días a su personal con un discreto uniforme de color gris. La compañía ha dejado esta vez a un lado los bocetos de diseñadores famosos que no llegaron a fraguar y ha apostado por una discreta y sencilla confección para sus uniformes. Hasta ahora, la mayoría vestían de calle.En la memoria de algunos trabajadores queda el recuerdo todavía del último modelo que les obligó a llevar la empresa: una cazadora de color rojo y diseño difícil de llevar; eso sí, último modelo del diseñador Alfredo Caral, que levantó más de un dolor de cabeza y la voz de los representantes sindicales. De ello se acuerda bien el empleado de la Oficina de Atención al Público Fernando Antigüedad, de 45 años, 14 en Renfe.

"Aquel uniforme estaba muy mal hecho, sobre todo la chaqueta, que era muy llamativa. Pero era una vergüenza llevarla. Ahora es otra cosa". Ahora Fernando se ve favorecido con su pantalón y chaqueta color gris, camisa blanca a rayas finas y rojas y corbata a juego gris marengo con bandas, inclinadas en blanco y rojo. "Es, cómodo, práctico y muy ponible. Nada estridente. Además tiene la, ventaja de que no gastas de tu. ropa. Me gusta y me veo muy guapo, la verdad", comenta entre risas.

El equipo con el que han sido obsequiados los 860 trabajadores obligados a vestir igual -todos aquellos que dan la cara al público (interventores, inspectores, informadores y taquilleros)- ha sido, para ellos: un par de pantalones de invierno y otro de verano, una chaqueta por temporada, otra de lana sólo para el personal de estación, dos camisas de manga larga y otras dos de corta, un chaquetón gris marengo, corbata, zapatos de color negro, un juego de cubrebotones, un alfiler de corbata y seis pares de calcetines. Ellas se vestirán de igual color que los hombres, pero con falda, dos de lana de sarga para el invierno y de lana fría en los meses de calor. Por orden de la empresa queda prohibida la minifalda. El largo mínimo de falda marca por encima de la rodilla. Además recibirán cuatro blusas, un pañuelo y seis pares de panties.

Para la elección del diseño se han tenido en cuenta las opiniones de los empleados. Un portavoz de la compañía lo cuenta: "Para que no ocurriera lo que hace unos cinco años, cuando se escogió a un diseñador conocido que levantó tanta polémica, esta vez se ha consultado a los trabajadores. Ellos han elegido el traje a su gusto, el más cómodo para trabajar". El presupuesto destinado por Cercanías ha sido de 21 millones de pesetas. De la confección del vestuario, al que. optaron por concurso público 11 empresas, se encargó El Corte Inglés, para los trajes de invierno, y Confecciones Hermoso, de los de verano.