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Major culpa a la prensa de la nueva crisis de liderazgo en su partido

Los rumores no han dejado de aumentar a medida que se aproximaba la fecha de las elecciones locales que se celebran hoy en el Reino Unido. El primer ministro británico, John Major, se enfrenta nuevamente a una crisis de liderazgo, un mal cíclico en el Partido Conservador. Sin embargo, el interesado arremetió ayer contra la prensa y culpó a la manía de "simplificar" las noticias en titulares dislocados de esta nueva escalada de rumores, que se apresuró a desmentir.

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Partidos a golpe de talón

Otro tanto habían hecho también ayer su número dos, Michael Heseltine, y su adversario en la batalla por el liderazgo tory del año pasado, John Redwood. Heseltine, que ya disputó con Major la sucesión de Margaret Thatcher en 1990, lleva varias jornadas desmintiendo rumores de que podría asumir la dirección del partido y del Gobierno.Pero desmentir no basta cuando el Partido Conservador, que defiende hoy más de un millar de puestos en ayuntamientos rurales y de distritos, se enfrenta a pérdidas de casi la mitad de sus concejales. Inasequible al desaliento, Major aprovechó un discurso ante la Newspaper Society para atacar a sus tres mayores adversarios de un solo golpe, la prensa nacional, la derecha de su propio partido y el enemigo político, el Partido Laborista.

No se trata sólo de la prensa ideológicamente contraria a los tories, sino de sus propios, y en otro tiempo fieles, diarios. A todos ellos, el primer ministro les pidió que abandonen esta tendencia simplificadora, que obliga a los políticos a mantener una guerra en las alturas para poder afrontar un debate racional.

Al negar que su figura al frente del Gobierno esté, nuevamente, en entredicho, Major contestó a los rebeldes tories, fuente de todos los rumores que han venido socavando su autoridad. El lunes, mientras recibía en Downing Street la su homólogo alemán, Helmut Kohl, sus compañeros de partido desafiaban la línea oficial anunciando que harán campaña contra la moneda única y propondrán a título privado un referéndum, antes de las elecciones generales de 1997.

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