NIEGAN LA GUERRA, NO EL AMOR

Jean-Pierre Vettovaclia, el ex embajador suizo en Bucarest, se escondió abochornado en algún lugar de- los Alpes después de que se revelara su apasionada relación con la presunta espía rumana Floriana Jucan, una reportera de sólo 21 años, que ayer dijo que escribiría un libro de la "maravillosa historia de amor" (Ver Gente del pasado sábado). La joven ha grabado 25 cintas de casete y el texto será completado con varias cartas que le envió el diplomático durante un año. Evenimentul Zilei, el periódico más sensacionalista de Rumania, donde trabaja Jucan, ha superado todas las ventas en los últimos días, y ayer anunció que se querellarían contra el Gobierno suizo, que acusó a la periodista, que apareció fotografiada en la portada con una escasa minifalda, mostrando sus largas piernas, de ser una espía. El director del diario, Ion Cristoiu, advirtió que no había pruebas y que "el Estado suizo ha dado la impresión de que tenemos sólo periodistas contratados por los servicios secretos". El Ministerio de Asuntos Exteriores suizo suspendió de sus funciones a Vettovaclia e inició una investigación sumaria en su contra. En un comunicado aseguró que "la relación de la espía con el diplomático", de 49 años y hasta ahora casado y con hijos, "representa un riesgo para la seguridad del Estado suizo". Jucan, calificada por sus superiores como "muy inteligente y cultivada", ha negado ser la agente enviada por el servicio secreto rumano para investigar sobre las cuentas bancanas del ex dictador Nicolae Ceausescu y la antigua familia real de ese país, ahora en el exilio.-