El PNV juzga insuficiente el giro autonomista del PP para apoyar a Aznar

La decisión del PP de no romper la caja única de la Seguridad Social impedirá un compromiso de fondo del PNV con José María Aznar. Ayer se produjo el primer encuentro de la comisión mixta de ambos partidos para tratar de buscar un acuerdo para la gobernabilidad. El desarrollo íntegro del Estatuto de Gernika y el consenso sobre la pacificación vasca son las propuestas más importantes que llevó la delegación nacionalista. Al término del encuentro, los representantes del PP señalaron que próximamente habrá un intercambio de propuestas.

El encuentro, celebrado al mediodía en un restaurante de Madrid, contó con representaciones de campanillas. Los vicesecretarios del PP, Rodrigo Rato, Mariano Rajoy y Jaime Mayor Oreja, y uno de los pesos pesados económicos, Cristóbal Montoro, representaron a la formación de José María Aznar. Por parte del PNV acudieron sus dirigentes Iñaki Anasagasti, Joseba Egibar y Juan María Ollora, así como el vicepresidente del Gobierno Vasco, Juan José Ibarretxe.La actitud más decididamente autonomista que ha adoptado el PP ante su necesidad de pactar con los partidos nacionalistas no va a ser suficiente para encandilar al PNV hasta conseguir un voto positivo a la investidura de Aznar.

Los compromisos autonómicos que está dispuesto a suscribir el PP como la policía integral para Cataluña, la cesión de un tramo del IRPF de un 15% a un 30%, la revisión de la figura de los gobernadores civiles y la reforma de la Ley de Costas son muy interesantes para CiU, pero no concitan el entusiasmo del PNV.

El partido de Xabier Arzalluz pretende conseguir el desarrollo íntegro del Estatuto de Gernika, esto es, las aproximadamente 40 transferencias pendientes, refrendadas por el Parlamento vasco en 1993.

La delegación nacionalista manifestó ayer que pretende que la negociación comience por los aspectos más duros pendientes de conseguir del Estatuto de Gernika, como el Instituto Nacional de Empleo (Inem) y la concertación del régimen económico de la Seguridad Social. Un desacuerdo en esta cuestión, manifestaron a sus interlocutores, impedirá un compromiso de fondo del PNV con el PP y, con él, el respaldo a la investidura de Aznar.

Los populares han manifestado, por su parte, que estarían dispuestos a llegar a un acuerdo sobre la gestión del pago de prestaciones de la seguridad social, pero no hasta el límite de romper la caja única.

El PNV incluye en este paquete negociador la renovación del Concierto Económico para otros cinco años. El vicelehendakari Ibarretxe puso ayer las cartas sobre la mesa de la compleja negociación en esta materia. Hace un año, los Gobierno socialista y vasco rompieron las conversaciones sin acuerdo.

Jaime Mayor Oreja pretende separar la pacificación del conjunto de la negociación. La pérdida de la mayoría absoluta del PP impide llevar adelante a este partido la reforma del Código Penal, con lo que no podrá exigir el cumplimiento íntegro de las penas de los terroristas. De este modo, se allana uno de los puntos de mayor conflictividad con los nacionalistas vascos.

Al término de la reunión, Rato destacó las coincidencias en política económica, industrial y europea, la distancia sobre terrorismo y la necesidad de seguir profundizando sobre desarrollo autonómico, área en la que la comunidad vasca presenta muchas características singulares.

Otros miembros de la delegación señalaron que no se había tratado todavía de buscar un acuerdo, sino de escuchar cada parte las posiciones de la otra, y que habían encontrado en los interlocutores del PNV "cierta voluntad de avanzar". En una próxima reunión, a la que todavía no se ha puesto fecha, ambos partidos llevarán ya propuestas por escrito.

Ni Rato descartó un acuerdo de gobierno ni Eguibar rechazó por completo la hipótesis de un Gobierno de coalición con los populares, puesto que el PNV, dijo, no va a poner límites inicialmente al proceso negociador. Sin embargo, para conseguirlo, admitió, habría que recorrer "un camino que va a ser laborioso y no exento de dificultades".