_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Horóscopo

Salud. Usted necesita aire fresco. No se corte a la hora de salir a la calle, que se la quieren arrebatar los desalmados. Merodea por Madrid una piara de asesinos. Si consiguen meterle a usted el miedo en el cuerpo, le sacarán las entrañas del alma, le quitarán la risa, la ternura, la salud y la paciencia. La jauría., opera también en interiores; de nada vale esconderse en casa. Omita el metro a horas tranquilas, principalmente en los últimos servicios de noche. Si tiene que entrar en la estación de Numancia, encomiéndese a san Saturio. Hay por allí sujetos inquietantes que están a la que salta. No se fe un pelo de las marquesinas; tras las lluvias, están de mírame y no me toques.Dinero. Está usted a la cuarta pregunta. Déjese invitar con naturalidad y astucia. Consuélese con los estoicos: no es más rico quien más tiene, sino quien menos necesita.

Ocio. Alguien le invitará a ver Cegada de amor. No dude tampoco en aceptar arroz a la cubana. Lleve a esa misma persona a Ubu president. últimamente anda usted bastante, ensimismado. No se pase; puede volverse tarumba. Converse con amigos a la caída de la tarde; salga con amigotes por la noche. No ladre; razone. Infíltrese en el carnaval. Eche una cana al aire. Entierre la sardina que lleva dentro, baile, la sardana. Júntese con catalanes. Ejerza el aperitivo de mediodía. Si acude a mítines, ejecute la sonrisa china, que consiste en poner cara de creerse todo cuando uno no se cree nada.

Amor. Esta semana, el idilio se interrumpió con un crespón negro. En pleno Día de los Enamorados, el destino asestó al' pueblo un zarpazo obsceno. Comience hoy mismo a recuperar miradas. Déjese querer. Quiera usted mismo, incluso. No menosprecie el amor propio ni la vergüenza ajena. Tome nota de insinuaciones a corto y medio plazo. Y si alguien le dice ven, lo deja todo usted, pero no demasiado. No busque; encuentre. No se agobie. Y no olvide que el amor y sus patronos también deparan crueles sinsabores. Esta semana, por san Valentín, mataron a un Valiente.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_