Sanz anuncia una sanción a Luis Enrique por su expulsión

La llegada de Arsenio Iglesias a banquillo del Real Madrid tuvo la escenografía reservada a las primeras figuras del espectáculo. Fue sentarse Arsenio en su puesto de observación y abalanzarse sobre él una nube de reporteros de lo audiovisual. Su chándal contrastaba con la sastrería fina, imagen del cuadro técnico anterior, de Mariano García Remón, de solemne traje oscuro.Arsenio estuvo acomodado en su asiento, conforme con todo, no más allá de 10 minutos. La segunda parte incluso la vivió en un ir y venir de su asiento. Pero al final parecía, de nuevo, el único ser humano en su sano juicio en todo el estadio.Disculpas

Muy cerca de donde Lorenzo Sanz, presidente del Real Madrid, hacía pública una sanción disciplinaria para Luis Enrique, tras su agresión a Christiansen, el jugador madridista se disculpaba por su acción y se declaraba arrepentido. "Ha sido bastante feo por mi parte. Aunque Christiansen me haya dado dos patadas por detrás", reconozco que no puedo responder de esa manera. También me extraña que el linier sólo haya visto lo que hice yo y no lo que él me hizo antes".

Arsenio, en su primera comparecencia ante los periodistas tras un partido, apeló a la expulsión para justificar los malos momentos pasados por su equipo: "Cuando se juegan partidos tan seguidos, la gente llega en condiciones muy justas. Si te expulsan a uno, entonces es peor. Pudimos haber resuelto antes el partido, pero después de la expulsión tuvimos que capear el temporal como pudimos". Arsenio siguió explicándose sobre el lance que cambió el signo del encuentro: "La acción de Luis Enrique no fue tan tonta como parecía. Christiansen le dio dos patadas por detrás. Yo creo, que cuando algunos jugadores asturianos vienen a este campo, como Manjarín, Abelardo o Luis Enrique, aquí siempre arman la de dios con ellos y tampoco es así".

El técnico gallego lamentó que su equipo no hubiera tocado más la pelota para que hubiera habido menos confrontación: "Así lo estábamos haciendo al principio y no pudimos seguir cuando nos quedamos con uno menos. El Madrid, en la segunda parte, se colocó de forma que el Oviedo, aunque dominó, tuvo pocas ocasiones claras de gol. Nos limitamos a cerrar los espacios".

La figura del partido volvió a ser Raúl, quien sin Valdano a su lado sigue goleando y marcando las diferencias. El jugador, que ayer sí celebró visiblemente sus goles, reconoció que aprovechó casi todas las ocasiones que tuvo su equipo: "Después de la expulsión nos han tenido encerrados. Hemos jugado mucho tiempo con 10 jugadores y hemos aprovechado las pocas ocasiones. Queda mucha Liga y se ve que hay equipos arriba que empiezan a titubear".