Penas de cárcel para cinco antiabortistas franceses
Cinco miembros de un comando anti-aborto fueron condenados ayer a penas de entre nueve y seis meses de cárcel firme por el Tribunal Correccional de la ciudad norteña de Valenciennes. Las penas, superiores a las solicitadas por el propio fiscal e inusualmente duras para una protesta sin víctimas, fueron acogidas con satisfacción por organizaciones progresistas y feministas.El jefe del comando era directivo del hospital en que irrumpieron el pasado 16 de octubre, para encadenarse en el servicio de ortogenia donde se practicaban interrupciones del embarazo. Xavier Dousseau, de 40 años, trabajaba como director de recursos humanos del hospital de Valenciennes y encabezó la protesta antiabortista "obligado por su conciencia", según explicó durante el juicio. Junto con otras nueve personas, entre ellas cuatro mujeres y un sacerdote, Dousseau entró con pancartas en su propio hospital y se encadenó con sus compañeros en las dependencias del servicio de ortogenia. Previamente, Dousseau había enviado una carta a la dirección del hospital, en la que afirmaba que el servicio de Ginecología "reniega de si mismo porque debe de ayudar a nacer y en cambio se dedica a asesinar".
El ex directivo fue condenado a 18 meses de cárcel, nueve de ellos en suspenso, más 20.000 francos (unas 480.000 pesetas) de multa y tres años de inhabilitación profesional. Otros cuatro miembros del grupo recibieron penas de 18 meses, 12 de ellos en suspenso. El resto fue condenado a penas en suspenso.
El Gobierno condenó en su día los hechos y expresó su alarma por el hecho de que un directivo hospitalario rompiera la ley que permite el aborto.
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