Cinco niños iraquíes, víctimas del embargo, llegan a Madrid para ser operados del corazón
Iniciativa española para paliar los efectos de las sanciones a Irak
Medio exhaustos llegaron anoche a Madrid cinco niños iraquíes, cuatro de ellos casi bebés, en un intento por sortear las carencias devastadoras, primero de la guerra y después del embargo de Naciones Unidas, a su país. Todos ellos padecen una enfermedad cardiaca congénita que requiere una operación impensable hoy en sus desabastecidos hospitales. Son los primeros, de un grupo de 35, que serán operados en el hospital madrileño de La Paz. Los rostros e sus madres reflejaban los 1.000 kilómetros de desierto recorridos en coche hasta Amán con sus niños en el regazo.
En total han sido 48 horas de viaje. La médico iraquí que les acompañaba quiso dejar constancia: "Los controladores de la ONU llegan a Bagdad cómodamente en avión. Los niños enfermos del corazón han tenido que viajar 48 horas hasta llegar a Madrid".Los pequeños, tres niñas y un niño, de distintas zonas de Irak, empezaban a desperezarse. Las madres apenas levantaban la mirada, frente a quienes fotografían y contarán después su odisea. "Un viaje bastante difícil, bastante cansado", fue lo único que acertaban a decir. Una abuela, de tez tan blanca como negro su chador, sonreía al nieto, aferrado a un biberón vacío
La iniciativa ha partido de la ONG Sur, el movimiento de Solidaridad con la Causa Árabe e Izquierda Unida, organizados en tomo a la Campaña por el. Levantamiento de las Sanciones a Irak. Este embargo está suponiendo un genocidio para el pueblo", dijo Ángeles, Maestro, diputada de IU.
La propia Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) culpa a esta situación, que se prolonga desde 1990, de la muerte de 560.000 niños y la desnutrición de buena parte de la población infantil de Irak. El pasado mes de diciembre, la publicación científica The Lancet se hizo eco de este informe en el que se subrayaba el estado de quiebra de los hospitales por la falta de recursos.
Los centros sanitarios sólo funcionan al 40% de su capacidad y sus reservas de medicinas han caído a niveles críticos, hasta el punto de que apenas cuentan con anestesia, según se recogía en el informe. El drama es mucho mayor si se tiene en cuenta que este país contaba con una sanidad floreciente y de cobertura universal.
En este contexto se enmarca la expedición organizada por españoles. Casi un año ha costado llevarla a término. Maestro explicó que ya se habían desarrollado acciones humanitarias de este tipo, pero sólo a nivel particular, "que se vieron muy entorpecidas por la dificultad para obtener los visados".
Las gestiones realizadas ante Asuntos Exteriores han suavizado los requisitos para este objetivo, mientras el Ministerio de Sanidad se ha hecho cargo de toda la asistencia sanitaria. Los pequeños y sus madres vivirán en una casa alquilada con las aportaciones del Ayuntamiento de Coslada y de la comunidad árabe en Madrid.
Los pacientes han sido seleccionados por los propios médicos iraquíes "entre los más graves". Los especialistas españoles ya tienen sus historiales clínicos, e incluso se ofreció enviar una UVI móvil a recogerles al aeropuerto, aunque finalmente no ha sido necesario. El tratamiento quirúrgico de su enfermedad conocida como tetralogía de Fallot- "tiene un pronóstico bueno", dice Ángeles Maestro, siempre dependiendo del estado de salud en el que lleguen los pequeños. En cualquier caso, siempre tendrán más oportunidades que las que actualmente les ofrece su propio país.
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