El 'comando Araba' tenía material para nueve coches bomba y esperaba un rifle de precisión

El comando Araba de ETA, desarticulado el martes en Vitoria tras la detención de tres de sus integrantes, tenía material explosivo como para fabricar hasta nueve coches bomba y estaba a la espera de recibir un rifle de mira telescópica con el que asesinar a una persona a distancia. La Ertzaintza encontró en el piso franco del paseo de la Zumaquera 179 kilos de amonal en varias cajas de madera, además de 11 cartuchos de explosivo de gelatina, cuatro cartuchos de goma, tres bombas del tipo lapa preparadas para su activación y material electrónico para su detonación. El consejero de Justicia del País Vasco, Ramón Jáuregui, declaró ayer que "'la paz también se logra desarticulando comandos; es un paso hacia la paz".

José Ignacio Alonso Rubio, Agustín Almaraz y Nerea Bengoa Ziarsolo, los tres detenidos en la operación policial, seguían ayer a la espera de ser puestos a disposición del juez central número cuatro de la Audiencia Nacional, Carlos Dívar. Fuentes policiales señalaron que no se esperaban nuevas detenciones. Interior confirmó que Gorka Andoni Arbulu López de la Calle, al que se considera colaborador del comando, huyó de Vitoria antes de que la Ertzaintza procediera a su detención.El consejero de Justicia del País Vasco, Ramón Jáuregui, declaró ayer que la sociedad necesitaba un éxito como éste. "Así también se construye la paz", declaró. En su opinión hay que complementar esta operación policial con una acción política unitaria. "Hay que seguir dándole a la sociedad un referente de avance inteligente y unitario de pacificación", dijo Jáuregui, quien indicó ayer que sólo queda por saber cuál es la fecha disponible para reunir el Pacto de Ajuria Enea.

En total, el material que encontró la Ertzaintza en una de las habitaciones del piso del número 96 del paseo de la Zumaquera, en Vitoria, hubiera permitido preparar, además de hasta nueve coches bomba, unos cinco artefactos del tipo lapa -tres ya montados para colocar bajo los vehículos y que se activan con el movimiento- y seis artefactos explosivos complementarios de 12 kilos.

Ollas y cacerolas

Según informó la Consejería de Interior, junto a los explosivos había todo un juego de aparatos electrónicos de ignición e incluso telemandos para activar las bombas a distancia. En el piso franco había también nueve ollas y cacerolas, que son los recipientes habitualmente utilizados para introducir en ellos los explosivos y fabricar así las bombas.

Los miembros del comando terrorista usaban dos pistolas Browning, del calibre nueve milímetros, con varios cargadores de 13 cartuchos, y disponían de un subfusil Mat con dos cargadores. Según la documentación encontrada por la policía en el piso, estaban a la espera de recibir un rifle de mira telescópica para asesinar a distancia a una persona. Los miembros del comando Araba tenían unas 300.000 pesetas para sus gastos y disponían de varios documentos de identidad, así como placas-insignias falsas que les acreditaban como agentes del Cuerpo Nacional de Policía.

En protesta por las detenciones, grupos de jóvenes lanzaron durante la noche del martes artefactos incendiarios contra la comisaría de la policía en el centro de Vitoria sin que se produjeran daños de consideración.

Durante la madrugada de ayer, unos desconocidos lanzaron cócteles molotov contra dos cajeros automáticos, uno en la Caja de Ahorros de Navarra en Huarte y otro en la Caja Rural de Zizur Menor, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Navarra.

El atentado contra la oficina de Zizur fue realizado por cuatro jóvenes a cara descubierta, que provocaron daños por valor de ocho millones de pesetas mediante un artefacto incendiario y varios litros de combustible, informa

El cajero de Huarte fue atacado también por cuatro jóvenes, quienes causaron "cuantiosos" daños, según las mismas fuentes.

Por otra parte, el pleno del Parlamento vasco de hoy solicitará probablemente el traslado de los presos de ETA a cárceles próximas al País Vasco. Antes de la sesión, los grupos del PNV, Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida intentarán acordar una enmienda transaccional a la proposición no de ley de Herri Batasuna en la que se solicita el reagrupamiento de los presos.

HB se refiere a la situación de 540 presos, a los que califica de "políticos", que están en las cárceles de España, y a otros 13 que están en Francia como consecuencia de la política de dispersión.