Cerrado por cuarta vez en un año el túnel de Alfonso XIII

Debe estar gafado. En junio, el túnel que une las calles de Alfónso XIII y de Corazón de María, y que había sido inaugurado en febrero, tuvo que ser cerrado por inundación. No estaba preparado para soportar las fuertes tormentas. En agosto pasó tres cuartos de lo mismo. Durante el puente de la Constitución, su tráfico interior fue cortado durante dos días porque un camión arrancó su revestimiento interior. Hoy y mañana no podrá ser atravesado de madrugada por "reparaciones". Enrique Villoría, concejal, de Obras, lo reconoce: "Este túnel nos trae de cabeza desde que lo inauguramos".Su historia es polémica. Fue inaugurado por el alcalde José María Álvarez del Manzano sin bajarse del autobús en el que iba montado. Los vecinos le esperaban con pancartas, pero no de agradecimiento, sino de protesta. El subterráneo se había llevado por delante los árboles y las aceras de las viviendas, cercanas. Su inauguración, sin embargo, no acalló las quejas.

Villoria lo explica: "El túnel se inunda cuando llueve torrencialmente. El colector del arroyo Abroñigal, al que están unidos sus desagües, no da abasto. En vez de absorber el agua, la expulsa". De hecho, estas deficiencias provocaron en agosto el desprendimiento de 60 metros cuadrados de revestimientos laterales y de dos lamas del techo. La presión del agua las reventó.

El edil cree que la "únicá solución es hacer un nuevo alcantarillado y ampliar la conexión con el colector". Las obras comenzarán el próximo año. El subterráneo, costó 1.407 millones.