Estrellas animadas

Bugs Bunny se ofrece como opíparo manjar para la boca de Lauren Bacall -no en vano es el conejo de la suerte-, Clark Gable nada con sus famosas orejas, la Bardot y Marylin viven aventuras pop en japonés y el ex alcalde de la Gran Manzana canta New York, New York en el metro, codo: con codo con Woody Allen. Son algunas de las cosas que los mitómanos pueden ver hacer a sus actores preferidos en el medio centenar de películas del ciclo Estrellas animadas, que se proyecta en la Filmoteca. Española a partir de hoy.No se trata de la hazaña de un productor genial, sino del trabajo de investigación del realizador e historiador Emilio de la Rosa, al que el Festival de Cine de Alcalá encargó que rastreara las apariciones de los actores de carne y hueso en las películas de animación. De la Rosa espera que los actores vivíparos sirvan de gancho para difundir la historia del cine de animación y demostrar que este arte de papel y celuloide no es simplemente una cosa de niños.

Charles Chaplin, el actor que más veces ha prestado sus rasgos a dobles de tintas o plastelina, fue el primero en traspasar el límite de la realidad para convertirse, en dibujo animado. Fue en un noticiario de 1915, cuando los telediarios eran en 35 milímetros. Desde entonces los dobles de los actores han sido invitados de anfitriones como el ratón Mickey, protagonistas de prodigiosas historias junto a otras caricaturas, reclamos para anunciar productos e incluso han compartido la pantalla con su modelo, como Kim Bassinger en Una rubia entre dos mundos.

Pero no todos están encantados de tener un gemelo. Bing Crosby, que no solía salir muy bien parado en el mundo de los dibus, se querello contra la Warner Brothers en 1935. No le gustó Bingo Crosbyana, un músical donde su doble enamora a una mosca -hembra, eso sí- con canciones y bailes.

De la Rosa cree que el beneplácito de la es trella dependía mucho del trato que se le dispensase a su gemelo de tinta. Disney -que se ha negado a que sus películas se proyecten en este ciclo- llevaba a los actores a sus cintas para tratarlos como invitados de honor, mientras que la Warner solía convertirlos, -en víctimas de Bugs Bunny o en divertidas parodias de sus defectos más conocidos.

La Filmoteca ofrecerá el primer día varias cintas realizadas entre 1916 y 1927 con, Chaplin como protagonista, la Warner ocupará las sesiones segunda y tercera, y las dos últimas mostrarán los trabajos más recientes, que incluyen en algunos realizados con plastelina. La muestra incorpora dos producciones españolas: El desván de la fantasía, de José Ramón Sánchez, y el Homenaje a Tarzán, del pintor vasco Rafael Ruiz, que aplicó la pintura directamente sobre la película.

Estrellas animadas. Filmoteca Española (Santa Isabel, 3). Sesiones: viernes 8, a las 18.30; domingo 10, a las 18.50; viernes 15, a las 18.30; sábado 16, a las 18.45, y domingo 17, a las 19.00.