Regresa el Enmascarado

En España se le rebautizó como El hombre enmascarado, aunque su creador, el guionista de cómics Lee Falk, lo lanzó a la fama con el nombre de The Phantom (El fantasma). Fue en febrero de 1936 cuando se publicó en Estados Unidos la primera tira del personaje, cuyas andanzas continúan en la actualidad y parecen interesar sobremanera a la industria audivisual: Joe Dante, el director de Gremlins, rueda una película de acción real con Billy Zane en el papel principal; y ahora se emite por las mañanas en Canal + una serie de dibujos animados en la que el personaje de Lee Falk (padre, también, de otro héroe de pro, el mago Mandrake) se instala en el año 2040, se echa encima unos cuantos elementos fantacientíficos y prosigue con su tarea de hacer el bien.El fantasma es, probablemente, el primer superhéroe con leotardos de la Historia, adelantándose en dos años al Superman de Jerry Siegel y Joe Shuster y en tres al Batman de Bob Kane. A diferencia de ellos, no es eterno. El primer Phantom se creó a mediados del siglo XVI cuando un aristócrata inglés naufragó en las costas africanas, se afincó en un poblado de la zona, se embutió (no sabemos cómo) en el esquijama y se dedicó a preservar el ecosistema y a repartir mamporros con la mano en la que lleva el famoso anillo de la calavera. La noble misión de preservar la ley y el orden dentro y fuera de la jungla pasó, junto con el esquijama, de padres a hijos. Así. llegamos a los años 30 de este siglo, en los que el Fantasma tiene una novia exploradora llamada Diana Palmer y viaja por todo el mundo con el uniforme reglamentario oculto bajo una gabardina de exhibicionista de lo más resultón.

Las tiras diarias de El hombre enmascarado han contado con dos dibujantes principales. Su. creador gráfico fue Ray Moore, cuyo grafismo borroso le dió a la serie un tono onírico y brumoso que desapareció cuando Wilson McCoy se hizo cargo del personaje a finales de los años cuarenta.

El estilo un tanto caricaturesco de McCoy incrementó la incorrección política del texto (los negros parecían más tontos y serviles que nunca) y a punto estuvo de convertir la serie, en- una comedia de situación ambientada en la jungla, pero devino la imagen definitiva del personaje. La que sirvió, por ejemplo, para que el- creador de Makoki, Miguel Gallardo fabricara un montón de historietas paródicas a principios de los años ochenta.

The Phantom 2040 A. D. es un intento de adaptar a un viejo héroe a unos nuevos tiempos. Han pasado casi 60 años desde su nacimiento y es poco probable que los niños de ahora se conformen con lo que a sus abuelos les parecía más que suficiente. Como a Steven Seagal, al nuevo Fantasma del año 2040 le interesan las bofetadas, la alta tecnología y la ecología.