El Gobierno belga permite al servicio secreto escuchas telefónicas sin orden judicial
El Gobierno belga aprobó ayer una proposición de ley que autoriza la realización de escuchas telefónicas sin permiso judicial previo. El Gobierno de coalición del socialcristiano Jean-Luc Dehaene entiende que da así rango legal a una práctica que los militares admiten que ya realizan. La propuesta pasará al Parlamento a principios de año, donde será aprobada sin problemas. En un principio, el Gobierno tenía intención de autorizar las escuchas tanto al Servicio General de Información (militar) como a la Seguridad del Estado (civil), e incluso dar cierta libertad de acción a los servicios de inteligencia de las comisarías de policía. Finalmente se ha limitado la autorización al espionaje militar con la cautela añadida de que sólo puede escuchar las conversaciones procedentes del extranjero. Los expertos se preguntan cómo van a evitar ahora escuchar conversaciones emitidas desde el propio país cuando, el sistema utilizado capta. todas las radiocomunicaciones.Así lo admitió hace unos días ante una quincena de testigos el actual patrón del espionaje militar, un general ingeniero especializado en radiocomunicaciones. A su juicio, es imposible seleccionar previamente, por lo que lo más práctico es grabarlo todo y después hacer la criba entre lo militar y lo demás.
La actual normativa de escuchas obliga a que éstas se ciñan a un proceso judicial abierto. La policía debe recibir el permiso del juez instructor y éste haberlo obtenido antes de un tribunal. Todas las personas escuchadas deben ser informadas posteriormente de que se les ha espiado y todas las conversaciones grabadas deben ser transcritas en la lengua. original de la conversación y en la del proceso judicial.
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