El presidente de Metro desconoce cómo parar el aumento de la inseguridad

El presidente de Metro de Madrid, Ramón López-Mancisidor, confesó ayer su impotencia para aplicar nuevas políticas y actuaciones con las que controlar el aumento de inseguridad que se aprecia en el suburbano de la capital. López-Mancisidor sí precisó que los delitos, concretamente los robos y atracos, han aumentado en un 20% en el último año en las dependencias del metro. Datos que no ratificó ayer la comisaría policial instalada precisamente en la estación de la Puerta del Sol.

Ramón López-Mancisidor acudió en la mañana de ayer a la Asamblea para explicar la orientación de los presupuestos de esta empresa pública, controlada por la Comunidad, en 1996. Habrá 80 millones más para limpieza (1.948 millones en total) y 1.600 menos para inversiones (12.850 millones). Cuando se le preguntó por las actuaciones que se emprenderán para incrementar la escasa sensación de seguridad actual, el presidente de Metro no detalló ninguna.El presidente de Metro sí explicó que en 1996 se presupuestarán 77 millones de pesetas más (en total, 956 millones) que en 1995 para la partida de, seguridad y anunció que la viguancia será mayor en la línea 7 (Las Musas-Avenida- de América). López-Mancisidor adelantó, en ese sentido, que se redoblarán los esfuerzos concretamente en la estación de Simancas, pero también en Las Musas, San Blas y Pueblo Nuevo, "por la presencia constante de drogadictos en los pasillos, andenes y trenes para comprar droga". López-Mancisidor aseguró que en el metro se producen alrededor de 300 atracos o robos anuales -casi uno por día de media- y comentó que trabajan unos 100 carteristas, fundamentalmente en las líneas 1, 4 y 6.

Fuentes policiales negaron que la delicuencia hubiese aumentado en el metro y sostuvieron que los detenidos se han duplicado este año. En esta línea, aseguraron que en los 10 primeros meses de 1994 se de nunciaron 82 tirones, cifra que se redujo a 43 durante el mismo periodo del presente año. La policía, con todo, indicó que los parámetros estadísticos para medir el índice de delincuencia en el transporte subte rráneo han variado de un año para otro. Estas fuentes mostraron su alarma únicamente por el aumento de la violencia en los robos, hecho que atribuyen a la entrada de nuevas bandas, mucho más agresivas que las tradicionales. Alarma que comparte el presidente de Metro. "Son gente que, al ser descubiertos, no huyen, sino que se encaran a su víctima o la policía", señalaron dichas fuentes.