Hacer examen de conciencia

La pacificación de la vida política fue uno de los temas abordados por Jordi Pujol al realizar la entrevista que hoy se publica en las páginas sobre las elecciones catalanas. "A España le iría muy bien que en los próximos años se produjera una gran reflexión sobre algunos problemas de fondo que tiene planteados la sociedad española, no sólo el mundo político, también el intelectual, periodístico, judicial.... Una etapa de calma que permita hacer un examen de conciencia sobre algunas cosas que han pasado estos últimos tiempos"."No bastará con que haya elecciones en marzo. Después, pase lo que pase, debería establecerse una cierta tregua política que fuera aprovechada para curar las heridas producidas en este tiempo y para hacer un examen de conciencia sobre lo que ha pasado y lo que hay queha cer para que este clima de paroxismo político no se repita".

Pregunta. Con todo lo que ha pasado, si los socialistas volvieran a ganar las elecciones, ¿se les debería perdonar o sería necesaria una catarsis?

R. En el aspecto político, quien juzga son las elecciones; y en el judicial, los jueces. Pero luego hay una cosa que para mí es muy importante, que es la recuperación del tono moral del país. A todas aquellas personas que tienen autoridad moral -y esto ha sido objeto de mis conversaciones recientes con Semprún y con Fraga y tengo ganas de hablar de ello con un hombre como Aranguren- les digo que en el futuro, después de las elecciones, si se consigue una cierta tregua política, deben salir y decirle al país que hemos de hacer las cosas de otra manera. Si manda el PP deberá demostrar que sabe ganar. Y el partido socialista, que sabe perder. Si vuelve a ganar el PSOE deberá demostrar que es capaz de superar sus resentimientos. Aunque parezca que esto es una predica de iglesia, no lo es. Un país funciona también por la sensibilidad moral que tiene la gente. El revanchismo debe acabarse. En lugar de echar leña al fuego, unas cuantas personas han de decir: ¡'Se acabó'! Y decirle al país que no ha habido un comportamiento adecuado.

P. La moral colectiva puede resentirse si se entierra políticamente.

R. Los jueces seguirán actuando. Que todos estén tranquilos. Aquí hay una cosa que no se detiene nunca, que es la justicia. Puede tener todos los defectos que se quiera, pero no se detiene. Es como una apisonadora, que camina poco a poco, tiene una imagen fea, molesta a los coches, pero siempre llega a su destino.