Pujol llama a los catalanes a que acudan en masa a las urnas tras conocer las encuestas

C. PASTOR / L. MAURI Los sondeos publicados ayer han tenido la virtud de acabar con uno de los tópicos más extendidos: que una abstención alta en los comicios autonómicos beneficia a Jordi Pujol. Las encuestas muestran que no es así señalan que la relativamente alta participación que se prevé para el próximo domingo puede permitir a CiU alcanzar su cuarta mayoría absoluta. No es extraño, por, tanto, que Pujol hiciera ayer un llamamiento, a los ciudadanos para que acudan en masa a las urnas. Los socialistas, maltratados por los sondeos, confían en que los efectos del mitin de Felipe González inviertan su tendencia a la baja.

" Los candidatos del PP y del PSC tienen tan pocos argumentos para centrar sus campañas que dicen que nosotros no queremos que la gente vaya a votar; esto es ridículo dijo ayer el candidato nacionalista durante un mitin celebrado en Girona "¿Por qué vamos a querer que no se vaya a votar si las encuestas sobre el estado de ánimo de la gente nos dicen que el 75% [el 60% en el sondeo de EL PAÍS de la población está satisfecha o muy satisfecha con el Gobierno de la Generalitat?", se preguntó."No todos los que opinan así nos votarán; pero forzosamente, si mucha más gente va a votar seguro que conseguiremos una gran victoria", agregó. Pujol va a echar el resto en la última semana de campaña, multiplicando su actividad como candidato para que no se le escape ni un voto. Ayer apeló a que necesita "toda la fuerza" para formar un "Gobierno fuerte" en Cataluña y para poder "negocia con fuerza" en Madrid y en Bruselás.

Para los socialistas, la publicación de las encuestas no ha sido una buena noticia. La publicada por este diario les pronostica un descenso de cuatro puntos y la pérdida de al menos 10 de sus 40 diputados, y la más favorable a sus intereses apunta un descenso de tres puntos y la pérdida de al menos seis escaños. Los estrategas de la campana socialista aseguran que al Final el PSC bajará "muy poco" porque hay un "voto oculto" que no aparece en los sondeos y porque han observado que la presencia de Felipe González en medio de la campaña, el viernes pasado, ha movilizado a la militancia.

El propio candidato del PSC, Joaquim Nadal, apeló ayer en Lleida a la existencia de ese voto oculto y subrayó que no sería bueno que CiU volviera a obtener mayoría absoluta porque ello produciría un "adormecimiento definitivo de la sociedad catalana". Durante su estancia en Lleida, Nadal mostró su autoridad. A la salida de la población de Balagüer vio desde el autobús electoral que dos jóvenes skinheads estaban peleándose en medio de la calzada. Bajó del vehículo, se dirigió a ellos dando grandes voces y acabó con la reyerta.

El otro gran perjudicado por los sondeos, el independentista Ángel Colom, se limitó a decir que no se fia de las encuestas que lo colocan en el último lugar, ya que las considera manipuladas, e insistió en que quedará tercero.