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'Futbolmanía' frente a hosteleros

El fútbol televisado sigue siendo un auténtico filón para las televisiones, según reflejan las audiencias de las cadenas semana a semana. Desde septiembre pasado, cuando comenzaron los partidos de las competiciones europeas y la Liga española, el fútbol ha sido seguido por millones de personas, lo que garantiza a las cadenas importantes ingresos de publicidad. Sin embargo, los propietarios de restaurantes, teatros y cines ven esta futbolmanía como una ruina para su negocio. El adelanto de los partidos de los sábados en media hora, que ha comenzado esta jornada, no parece contentar a nadie.

En septiembre, a nivel nacional, un partido de fútbol, el jugado por el Real Madrid y el Grasshopper, fue el programa más visto del mes, con una cuota de pantalla del 48,6% y 7.050.000 espectadores. Dos partidos más se colocaron entre los cinco espacios con más audiencia. Además, en las seis cadenas autonómicas -TVG, Telemadrid, ETB, TV-3, Canal Sur y Canal 9- el programa más visto del mes siempre fue el fútbol y durante el mes de octubre continuó la misma tónica.A nivel nacional, los dos partidos de la Liga de Campeones disputados por el Real Madrid y emitidos por TVE-1 lograron una audiencia cercana a seis millones y medio de espectadores. Que el fútbol deja en su casa los sábados a muchos millones de espectadores lo corroboran los empresarios del sector del ocio. Desde la temporada pasada, los empresarios de hostelería, teatros y cines se han quejado amargamente de que el fútbol retransmitido los sábados por la noche, está acabando con sus negocios. Los empresarios de hostelería han cifrado sus pérdidas en torno a 110.000 millones de pesetas y anuncian nuevas movilizaciones en toda España y boicoteo a las marcas publicitarias que se anuncien durante las retransmisiones. José Luis Guerra, secretario general de la Federación Española de Restaurantes (FER) piensa que la solución al problema es "trasladar el partido de los sábados a los domingos".

El Partido Popular, a través de una proposición no de ley presentada el mes pasado a la mesa del Congreso y de las manifestaciones de varios de sus diputados autonómicos también se ha mostrado proclive a las propuestas de los empresarios. Convergencia y Unió también ha presentado en el Congreso una propuesta para que todas las partes implicadas en el conflicto constituyan una comisión negociadora para solucionar sus diferencias.

La respuesta de la FORTA fue rotunda durante el año pasado: la hora de comienzo de los partidos de los sábados, las 21.00, no se tocaba. Sin embargo, a principios de octubre las autonómicas decidieron, "en contra de sus propios intereses", como reconocen directivos tanto en la FORTA como en algunas cadenas autonómicas, adelantar el partido de los sábados a las 20.30, atendiendo así a una propuesta realizada por otra de las partes implicadas en el conflicto, la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Ésta, en boca de su presidente, Antonio Baró, se decantó por el horario de las 20.30 esta temporada. Enrique Laucirica, secretario general de la FORTA, llegó a hablar de una "campaña de desprestigio que está afectando a la imagen de las propias cadenas" para justificar el cambio de hora.

Para la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, que engloba a los grandes almacenes, "el adelanto del horario del fútbol afecta a nuestra clientela. Cuando nos estamos recuperando del golpe del cierre de los domingos, llega esta decisión acordada de espaldas a nuestro sector, y contra la que lucharemos con todos los medios legales a nuestro alcance".

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