Un coche pintado

En el patio de entrada del edificio de la Royal Academy, protegida tras una urna de cristal, está una de las últimas obras del artista. Un coche BMW pintado con gran profusión de colores, que ha pasado a formar parte de la colección de coches artísticos que posee la empresa de automóviles alemana, como los pintados por Warhol y Calder. BMW es la firma patrocinadora de la muestra de Hockney. "La idea era que produjera la impresión de algo que se ve desde dentro", dijo Hockney sin querer extenderse demasiado en el tema. "Después de todo", añadió, "no es más que un coche pintado".

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