La oposición, en contra de que el PP reparta el suelo barato por sorteo

"Completamente perverso", "brutalidad", "alucinante". Los grupos municipales de Izquierda Unida y el PSOE despotrican contra el anuncio del concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, de que a partir de ahora las adjudicaciones de suelo municipal barato se harán por sorteo. "No se puede depositar la responsabilidad en los niños de San Ildefonso", dice el portavoz socialista Juan Barranco. "Se abrirá la puerta a todo tipo de trapicheos y corruptelas", augura el líder de IU, Paco Herrera.La idea del reparto con bombo ya surgió antes de la concesión hace 10 días de suelo para construir 2.300 viviendas de protección oficial y de precio tasado, pero Del Río la anunció a raíz de las acusaciones de Barranco de connivencia de Herrera con el PP en el reparto de fincas. Herrera había votado a favor de la adjudicación de las parcelas correspondientes a los pisos de protección oficial. Para evitar nuevas polémicas, las reclamaciones, al bombo de la lotería.

Herrera evita a Barranco

Esa declaración desató un cruce de insultos y descalificaciones entre los dos máximos representantes de la izquierda municipal madrileña que ha llevado la actividad política en el Ayuntamiento a una situación absurda: Herrera no acude a las juntas de portavoces y tampoco a una tertulia radiofónica en la que participaba junto a Barranco."Para adjudicar el patrimonio de todos los madrileños hay que justificar por qué se concede suelo a unos sí y a otros no", asevera Barranco.

"La subasta tampoco es de recibo porque entonces se subiría el precio del suelo", añade. "Hay que hacer unos pliegos de condiciones que establezcan baremos claros, cosa que no ha sucedido en el anterior concurso".

Paco Herrera, por su parte, considera que el método de la subasta implica "instalar la oferta de suelo municipal en el mercado al servicio de las inmobiliarias". "Es la dinámica de los subasteros", protesta, "prima a la oferta que más pague, sin más", dice. "Y el sorteo producirá que las empresas fuertes presenten 200 ofertas distintas, porque pueden pagar 200 proyectos, y tengan. más posibilidades que las pequeñas cooperativas".

La solución que propone Herrera coincide en la apuntada por los socialistas en la claridad de los criterios de baremación.

Pero Herrera hace hincapié en la potenciación de las cooperativas que cumplan los plazos de construcción y gestionen bien el dinero de los interesados, pero evitando una excesiva concentración del riesgo como sucedió con la adjudicación del 30% de las parcelas del Plan 18.000 a la promotora PSV, vinculada al sindicato UGT.

"Pero todo esto es hablar por hablar", sentencia Herrera, "porque el PP no va a volver a adjudicar suelo municipal para pisos baratos. No es política de la derecha, y si lo hacen es por nuestras presiones".