El tercer asalto del maestro

"Sé la marca que Miguel es capaz de hacer en una hora, pero no sé lo que puede hacer". Así se explica estos días el enigmático Sabino Padilla, el médico-preparador de Induráin, el hombre que planifica todos los pasos del. campeón navarro, el hombre que ha programado toda su preparación en altura, en Colorado y en Colombia. Todo está listo. Sólo falta que la máquina responda. Que Induráin diga la última palabra: adelante con el récord.La duda de Padilla, un hombre esclavo del método científico, para quien la duda es obligatoria ante cada nuevo paso que da, es la única incógnita que rodea el proyecto del récord de la hora preparado hasta en sus menores detalles por el equipo Banesto. ¿Y cuál es esa incógnita si se puede saber? Ni más ni menos que la voluntad de Induráin.

Induráin aún no ha confirmado que saltará al velódromo de Bogotá el próximo domingo a las nueve de la mañana. Para él, lo más importante era el Mundial. El récord no era, no es, otra cosa que el postre del festín. Ese es el estilo Induráin y el estilo Banesto. "El último día del Tour, el año pasado, Miguel me dijo: "¿Y si intento el récord de la hora dentro de una semana?", recuerda Echávarri. "Nos pilló sin nada preparado, sin bicicleta y sin nada".

En esta ocasión no pasará lo mismo. Si Induráin da el sí, no se tardarían ni dos horas en tener todo el operativo preparado. Un récord de la hora no es sólo un hombre dando vueltas por un velódromo durante 60 minutos. Hay una serie de aspectos comerciales y de glamour que convierten a la cita en un momento para recordar. "Evidentemente nuestro estilo no es hacerlo por la noche y a oscuras", dice Echávarri.

Hace un par de semanas, el mecánico Enrique Sanz voló hasta Bogotá con una bolsa que guardó en un armario en la cabina del piloto del avión. Allí iba guardada la Espada Evolución IV, el arma del récord. El carbono-kevIar, material en que está fabricado el cuadro monocasco, es muy sensible y no aguantaría sin fracturas un traslado en una bodega de carga despresurizada.

Los últimos días Enrique Sanz se dedicó a montarla con mimo. La Evolución IV es la Espada del récord de hace un año con varias mejoras -la horquilla delantera sobre todo, y la posición del sillín: Induráin volará en el récord en la posición que usa en carretera, sin adelantarla dolorosamente como el año pasado- que inciden en un mejor aerodinamismo, la asignatura pendiente de Induráin.

Con la bicicleta a punto, sin las improvisaciones de antaño, sólo faltan el velódromo y la comercialización. La puesta a punto de la pista Luis Carlos Galán, los 333,333 metros del velódromo de Bogotá, ha corrido pareja con la rentabilización económica del intento. Aparte de la publicidad estática que se lleve desde España, se ha firmado un acuerdo con Postobón. La pista será protegida del viento con gigantes vallas publicitarias anunciando Malta Leona, bebida que también publicitará Induráin por la televisión colombiana. os derechos televisivoslos posee Canal +, que los cederá gratuitamente, a Colombia a cambio de la producción de imágenes.

Hoy es el día señalado para que se produzca el anuncio oficial. Pero, antes, Sabino Padilla y José Miguel Echávarri se acercarán a conversar con Induráin. Intentarán despejar la última duda.

Escuchar de labios del campeón la palabra mágica, ese "adelante" que significará ponerle fecha a la recta final de los preparativos en curso. De recibir el sí, Induráin seguirá con sus metódicos entrenamientos mientras su entorno preparará, el detalle decisivo, que no es otro que la elección de la hora adecuada para intentar el asalto, una hora del día en la que no debe haber viento sobre el circuito.