González deja en manos del PSOE la decisión sobre su candidatura

Felipe González sigue dejando abierta la posibilidad de encabezar las listas del PSOE en las elecciones generales anunciadas para marzo. Ayer, en Madrid, se remitió a la decisión que adopte el partido en noviembre. Ante la gran expectativa que suscitaron sus declaraciones de la víspera en Washington, en las que no descartó volver a ser cabeza de cartel, trató de aplaza el debate indicando que la reflexión sobre su propia candidatura no está cerrada. Lo que sí dejó rotundamente claro es que los comicios serán en marzo.

El presidente del Gobierno tuvo el jueves en Washington un gesto para los militantes y electores socialistas al dejar entrever en conferencia de prensa que todavía es posible que encabece las listas del PSOE en marzo.Conseguido el efecto de neutralizar la convicción existente desde julio de que abandonaba, ayer, en Madrid, no quiso comprometerse más allá de lo que dijo en la capital norteamericana, pero dejó abierta la posibilidad de presentarse al indicar que las cosas "están como estaban" y que serán los órganos internos del PSOE los que, avanzado noviembre, lo decidan.

En el curso de una rueda de prensa con el primer ministro polaco, Josef Oleski, González manifestó: "Estoy exactamente donde estaba. Lo de ayer [sus declaraciones del jueves en Washington] no añadía ni quitaba nada. Lo hice, además, de una manera muy distendida. No estoy inclinado. Estoy en la misma posición. Mi eje de rotación no se ha movido".

A renglón seguido, se remitió a la decisión que adopte el Comité Federal del PSOE, el órgano máximo de los socialistas entre congresos, que se celebrará en noviembre o quizá en diciembre. "Siempre que me plantean esa pregunta llegamos al mismo resultado. Hay que esperar a que el partido tome una decisión sobre la candidatura y creo que es prematuro pronunciarse ahora".

Lo que sí aclaró, y de forma rotunda, es que las elecciones generales se celebrarán en marzo de 1996. Insistió en que es una decisión fruto "de una reflexión seria" y "no por cabezonería". Lo único que le queda por decidir es cuál de los cuatro domingos de marzo será la fecha, añadió.

Lo más serio y riguroso

"Lo más serio y riguroso es cumplir lo que se ha dicho a la opinión pública y al resto de las fuerzas políticas, aunque la mayoría no lo haya aceptado", argumentó.

También aclaró González que será el ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, el representante gubernamental en el debate que se celebrará el próximo jueves en el Congreso para explicar las presiones sufridas por el Ejecutivo por parte del ex banquero Mario Conde y sus representantes.

Los portavoces del Partido Popular e IU-IC reiteraron ayer sus duras críticas contra González por no ser él quien comparezca ante el pleno. El presidente argumenta que Belloch dispone de más información que él. González se presentó ante los periodistas muy relajado y no se ahorró bromas en las respuestas a preguntas referentes, en su mayoría, a la situación de la Unión Europea. A una sobre la leche respondió: "No sé si los españoles la tenemos buena o mala".

Bromeó también al recordar que el ex presidente de la extinta Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov vaticinó en el año 1989 que la unión alemana tardaría 50 años en producirse, o cuando dijo que, en la rueda de prensa conjunta, el primer ministro polaco contaba con una gran ventaja sobre él porque, al conocer el castellano, aprovechaba la traducción para preparar sus respuestas.