EL PAPA RECIBE A LA INFANTA ELENA
Juan Pablo II recibió ayer en su residencia veraniega de Castelgandolfo a la infanta Elena y a su marido, Jaime de Marichalar, duques de Lugo. La audiencia privada incluyó una conversación a puerta cerrada de los nuevos esposos con el pontífice de unos 10 minutos. Luego, en presencia de informadores y personal diplomático que esperaba en la Sala del Consistorio, se procedió al intercambio de regalos. El Papa entregó a la infanta un rosario y a su marido la medalla del pontificado. La real pareja donó al pontífice un vaso de cristal de La Granja. La infanta Elena vestía peineta alta y mantilla sobre un traje de chaqueta negro que, tras la audiencia, cambió por otro traje beis, con el que asistió al almuerzo que le fue ofrecido por el embajador de España ante la Santa Sede, Pedro de Aguirrebengoa. Participaron en la comida altas personalidades vaticanas, como los obispos Gian Battista Re, sustituto de la Secretaría de Estado, y Jean Louis Tauran, secretario del mismo departamento, o el cardenal español Antonio María Javierre.-
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