De vergüenza

Paseo con mucha frecuencia por los alrededores del cementerio de la Almudena, una zona por la que se pasea muy a gusto. Pues bien, en los jardines que hay delante de su entrada principal junto a la carretera de Vicálvaro, existe una pequeña edificación que en sus tiempos correspondió a unos servicios evacuatorios y que cumplió la misión para lo que se destinó. Pero hoy por hoy sólo sirven para dar vergüenza por las condiciones en que se encuentran de abandono, dejadez y suciedad. Llenos de botellas rotas y, lo que es peor, de jeringuillas que todos suponemos de dónde proceden.Señor alcalde, o en su defecto señor presidente de la Junta de Distrito de Ciudad Lineal, a quien creo corresponde esa zona, ¿por qué no se dan ustedes una vueltecita por ese lugar para que vean lo cierto de mi escrito?

Si no quieren tirar el pequeño edificio, al menos tapien su entrada.- Miguel López Cárdaba.