Dirigentes del PP gallego se suben el sueldo en contra de los consejos de austeridad de Aznar

Los deseos de José María Aznar vuelven a darse de bruces con la realidad gallega. Dirigentes regionales del PP han ignorado abiertamente los consejos de su líder nacional para no aumentar los sueldos de los cargos políticos en las instituciones locales. Es el caso del presidente de la Diputación Provincial de La Coruña, Augusto César Lendoiro, quien, tras acceder al cargo en las elecciones del pasado mes de mayo, ha creado tres nuevas vicepresidencias para miembros de su partido, cada una de ellas remunerada con cerca de ocho millones de pesetas anuales.

"Son excepciones que confirman la regla", sostiene un destacado miembro de la ejecutiva regional del PP. "Se ha difundido el mensaje de que es necesario dar ejemplo de moderación salarial, y todo el mundo debería cumplirlo. Pero tampoco existe una imposición expresa". Con todo, la dirección gallega del PP ha intervenido en dos ocasiones en las últimas semanas para reconvenir a nuevos cargos públicos del partido que habían llevado demasiado lejos la generosidad consigo mismos.

Nada más sentarse en el sillón, Manuel Abeledo, presidente de la Diputación de Pontevedra, se fijó un sueldo que superaba en un millón de pesetas anuales los emolumentos que percibía su antecesor y compañero de partido, César Mera. Abeledo también cargó a cuenta del organismo provincial los gastos de alquiler de una vivienda para su familia. El propio secretario general del PP gallego, Xosé Cuiña, realizó al presidente de la diputación una "sugerencia amistosa" para que no incumpliese las promesas de austeridad de su líder nacional. Ahora, Abeledo vuelve a cobrar lo mismo que su antecesor, aunque recibe alrededor de otras cien mil pesetas en concepto de vivienda, según fuentes populares, ya que no tiene domicilio fijo en la ciudad de Pontevedra.

La alcaldesa de Noia

Asimismo, la alcaldesa de Noia (La Coruña) -un municipio de 13.000 habitantes-, María del Carmen Abeijón, accedió a rebajar a la mitad su salario inicial de medio millón del pesetas mensuales por indicación del PP. A los populares les resultaba especialmente embarazoso el recuerdo de lo ocurrido en la anterior corporación, en la que ellos mismos, aliados con el PSOE, recortaron las remuneraciones del entonces alcalde, Bieito González, al salario mínimo interprofesional.Sin embargo, el mensaje no ha calado en la Diputación de La Coruña, conquistada por el PP tras las elecciones de mayo. El anterior presidente, el socialista Salvador Fernández Moreda, cobraba su sueldo de diputado nacional y había concedido dedicación exclusiva a un vicepresidente, que percibía unos emolumentos anuales de cerca de ocho millones de pesetas. El nuevo titular del organismo, Augusto César Lendoiro, tendrá unos ingresos de 9.031.284 pesetas, equiparables a un consejero de la Xunta, y junto a él trabajarán cuatro vicepresidentes. Uno de ellos, su cuñado Antonio Gómez, ejerce además de portavoz, con un sueldo de 8.762.626 pesetas.

Los otros tres, los alcaldes de Ferrol y Ribeira y un concejal de la pequeña localidad de Ordes, se mantienen en el sueldo del anterior vicepresidente socialista, 7.944.231 pesetas. El PSOE también ha criticado que Lendoiro aumentase de tres a nueve el número de asesores y que compatibilice hasta media docena de cargos públicos y privados: presidente de la diputación, del Deportivo de La Coruña y del club de hockey Liceo, diputado en el Congreso, concejal de la ciudad gallega y gerente de un colegio privado.

EI dirigente popular ha anunciado que en breve abandonará su escaño en Madrid, así como el club de hockey.

En otros municipios de menor rango, las autoridades locales también parecen contradecir la doctrina oficial del PP. Son los casos de los alcaldes de las localidades pontevedreses de Lalín, José Crespo, que cobra 480.000 pesetas mensuales; de Portas -sólo 3.325 habitantes-, que percibe 324.000, y de Ponteareas, José Castro, que completa su sueldo de senador, con otros ingresos de 200.000 pesetas del ayuntamiento.

Un portavoz de la ejecutiva regional del PP dijo que se trata de casos aislados y destacó que en los tres últimos años los sueldos de los altos cargos de la Xunta apenas han crecido un 3%.