Un bebé feliz

Hace 10 meses, di a luz (en una clínica privada) a una niña con una hernia diafragmática, gravísima malformación congénita consistente en el desplazamiento de todos los órganos al espacio que debería ocupar el pulmón, que en este tipo de hernias es prácticamente inexistente, replegándose como una deforme masa celular. Gracias a la respiración artificial pudo ser intervenida con seis horas de vida por el doctor Juan Carlos Ollero Fresno y su equipo en el hospital del Niño Jesús (Seguridad Social y de Madrid, adonde llegó ya en "estado de óbito", según constaba en el parte de ingreso. En dicha intervención a vida o muerte a nuestra pequeña Anita le pusieron en su sitio todos y cada uno de sus diminutos órganos, le repararon el pulmón inflándoselo, cerraron diafragma, extirparon apéndice, rotaron debidamente sus pequeños intestinos y demás cosas que para profanos en la materia nos es difícil explicar.

Ana es hoy un bebé feliz de 10 meses completamente normal gracias a las manos de un médico y su equipo.

Con estas líneas sólo pretendo dos cosas: una, agradecer, aunque todo agradecimiento me parecerá siempre poco, algo tan grande como la vida de mi niña al equipo antes mencionado, y otra, animar a políticos presentes y futuros de nuestro país a que mimen a un sector y a sus profesionales cuya labor lo es todo. ¿Acaso. no lo es la vida?