El lugar de la mujer
Siempre habrá dudas sobre la oportunidad de convocar gigantescas conferencias internacionales y, en cifras, la conferencia sobre la mujer de Pekín superará a todas las demás. Sin embargo, esto no debe ser una excusa para ignorar o desestimar las importantes cuestiones que se debatirán en Pekín, Por supuesto, se dirán muchas cosas que podrán considerarse ridículas y habrá tortuosas negociaciones, a menudo irrelevantes, sobre la redacción de las resoluciones de la conferencia Pero, a pesar de todo esto, las tres conferencias sobre la mujer que ha celebrado anteriormente la ONU han demostrado ser ocasiones excelentes para establecer contactos, para desarrollar nuevas ideas y campañas y para abrir nuevos mundos a delegaciones acostumbradas a sus limitaciones nacionales y culturales.Existen claras diferencias entre las prioridades del Tercer Mundo y las de las privilegiadas sociedades occidentales. Existe también una nueva división entre los fundamentalistas -católicos, musulmanes y judíos- y la corriente principal de pensamiento. Pero desde la anterior conferencia sobre la mujer de Nairobi, en 1985, todo esto ha sido suavizado por una mejor comprensión de la comunidad de intereses entre todas las mujeres. (...) Con el final del apartheid y del comunismo, y con el diálogo entre árabes e israelíes, se han eliminado elementos de confrontación que tan perturbadores resultaron en Nairobi.
4 de septiembre
