No, gracias
La postura del señor Aznar respecto del apoyo y comprensión a las pruebas nucleares que Francia realizará próximamente tiene tufo de tragadera y sumisión de las directrices marcadas por el nuevo presidente de Francia.Cuando el 95% de la población mundial rechaza con ro tundidad este tipo de pruebas nucleares, por el daño tan inmenso que causan al planeta, Aznar, en un alarde de soberbia e incomprensión, se alía con Chirac para destruir un poco más el planeta. No se entiende este apoyo contracorriente de un aspirante a primer ministro, salvo pactos oscuros que el fu turo nos pueda deparar. Esperemos que si llega al cargo al que aspira (no por mi voto, desde luego) no nos venda a los intereses de Chirac. Mal camino ha elegido Aznar para promocionarse internacionalmente. Defensores nucleares: no, gracias.
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