300 muertos en un choque de trenes en la India
Se teme que más de 300 personas murieron y otras 400 resultaron heridas en el choque de trenes ocurrido en la madrugada de ayer en Firozabad, a unos 200 kilómetros de Nueva Delhi y a unos 40 del mausoleode Taj Mahal. El accidente, que puede haber sido, si se confirman los últimos datos, el más grave en la historia de las catástrofes ferroviarias del país, ocurrió después de que el expreso de Kalindi chocara contra una vaca que estaba en la vía de Firozabad. Los frenos del tren se rompieron y éste se deslizó hasta quedarse parado. Poco después le embestía por detrás, a toda velocidad, el expreso de Purshottam, que, al parecer, recibió por error la indicación de que la vía estaba libre.
La cifra oficial de muertos era anoche de 225, pero un responsable de la compañía nacional de ferrocarriles declaró a la agencia local PTI que temía que el total de víctimas rebasara los 300 pues los equipos de rescate continuaban sacando numerosos cuerpos sin vida. No se han localizado por ahora cadáveres de ciudadanos extranjeros, pero otro portavoz de la compañía señaló que "lo normal" es que entre las víctimas se encuentren algunos turistas extranjeros, ya que el accidente ocurrió cerca de Agra. En esa bella ciudad del imperio mogol se encuentra el Taj Mahal, el monumento más famoso de la India y una de las siete maravillas del mundo. El portavoz anunció que se ha iniciado una investigación sobre las causas del accidente. Fuentes de los ferrocarriles indican que el expreso de Purshottam recibió por error la señal de que la vía estaba libre.El Consulado español en Nueva Delhi informó a este diario que no tenía noticias de que entre las víctimas figuraran españoles, pero debido a la lentitud burocrática del país no se podrá garantizar con seguridad este hecho hasta hoy.
Equipos del Ejército colaboraron en las tareas de rescate de este accidente, el más grave desde 1981, cuando 270 personas murieron al caer un tren al río Bagmati, en el norteño Estado de Bihar.
Tres vagones del expreso de Kalindi resultaron totalmente destruidos, al igual que la locomotora y dos vagones del expreso de Purshottam, que se dirigía a Nueva Delhi.
Un ruido enorme
El accidente ocurrió cuando la mayoría de los aproximadamente 2.200 pasajeros que portaban los dos trenes dormía. Eran las tres de la madrugada del domingo. "Me despertó un ruido tan enorme que creí que era una bomba", declaró uno de los heridos ingresados en Firozabad. Otros han sido llevados a Agra, a 40 kilómetros, por falta de capacidad y medios de los hospitales de Firozabad.
El primer ministro indio, Narasiinha Rao, que la semana pasada se hizo cargo de la cartera de Ferrocarriles, expresó su dolor por el suceso. El hasta entonces ministro de Ferrocarriles, Jaffer Sharief, fue destituido después de negarse a dimitir, como le pidió Rao, por las diferencias que mantenía con la cúpula del gobernante partido del Congreso.
La India tiene una de las mayores redes ferroviarias del mundo. Con 900 millones de habitantes, los ferrocarriles indios transportan alrededor de 12 millones de personas al día. Los vagones van abarrotados, las vías están en malas condiciones y en general los trenes son viejos. Un centenar de personas han muerto en los dos accidentes ferroviarios que se han registrado en el país hasta ayer.
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